Muchos usuarios optan por almacenar sus contraseñas en el navegador. Sin embargo, esta no es la práctica más segura, ya que la mayoría de los navegadores utilizan gestores de contraseñas cuya seguridad no es la deseable.
Actualmente, gran parte de los navegadores poseen sus propios gestores de contraseñas nativos. En ellos se almacenan las claves en una lista de texto pero, en ocasiones, no están lo suficientemente protegidas. Esto significa que los cibercriminales, al tener acceso a un ordenador, podrían obtener las claves en cuestión de segundos. Para ello, bastaría con que accediesen a la configuración del ordenador y al administrador de contraseñas.
La opción más recomendada consiste en recurrir a gestores de contraseñas de terceros, que permiten el almacenamiento de las contraseñas de manera más segura. Uno de los más destacados es ‘Keepass’. Otra opción, en este caso de pago, es ‘Roboform’, una plataforma que además de almacenar las claves podrá generar contraseñas seguras y únicas para cada una de tus cuentas.
Desde el FBI estadounidense han enumerado una serie de cuestiones a tener en cuenta a la hora de establecer contraseñas seguras. En primer lugar, recomiendan un mínimo de 15 caracteres, combinando mayúsculas y minúsculas. Asimismo, indican la utilización de varias palabras sin ningún tipo de relación entre sí.
