La Administración Nacional de Aeronáutica y el Espacio (Nasa) ha confirmado que el impacto de la nave DART contra la superficie del asteroide Dimorphos ha logrado desviar la trayectoria del cuerpo celeste. De esta manera, la misión ha resultado ser un éxito.
Este martes, la Nasa ha explicado que se ha logrado el objetivo de la misión DART, para desviar la trayectoria del asteroide Dimorphos. Este cuerpo celeste, ubicado a unos 11 millones de kilómetros de distancia respecto a la Tierra se ha convertido en un ‘cometa’, con una cola de más de 10.000 kilómetros.
Bill Nelson, administrador de la agencia estadounidense ha indicado que, antes del impacto, Dimorphos tardaba 11 horas y 55 minutos en girar sobre Didymos, un asteroide de mayor tamaño. Tras el impacto se ha logrado reducir ese intervalo en 32 minutos. “Hubiera sido un éxito si la hubiera ralentizado solo unos 10 minutos, pero la redujo, de hecho, 32”, ha celebrado.
Esta misión, que también cuenta con la colaboración de la Agencia Espacial Europea (ESA) consiste en el primer ensayo de la humanidad para salvar nuestro planeta ante posibles impactos de asteroides en el futuro.