La Federación de Servicios a la Ciudadanía de CCOO (FSC-CCOO) y el sindicato portugués Fectrans denunciaron este jueves la precariedad laboral en el sector del transporte de mercancías por carretera con una concentración en la frontera bajo el lema bilingüe ‘La fatiga mata / A fatiga mata’, con el objetivo de reivindicar una mejora en las condiciones salariales y laborales del personal del transporte del sector.
ICAL. Dentro de la campaña que ambos sindicatos llevan a cabo de forma conjunta desde hace varios años, unos 200 delegados portugueses y españoles, desplazados del país vecino y de distintas comunidades autónomas, al frente de los que se encuentran las direcciones de ambos sindicatos, se movilizaron para informar a los conductores que hacían parada para descansar en la campa de la localidad fronteriza de Fuentes de Oñoro.
Los delegados repartieron un díptico en castellano y en portugués con las principales reivindicaciones de un sector que, según ambos sindicatos, “está sufriendo de forma atroz el abuso de las empresas, con la desregulación de las condiciones de trabajo y unos salarios muy a la baja”.
Las organizaciones consideran “necesario y urgente” acabar con las denominadas “empresas-buzón”, que “escapan al control de la seguridad social y con salarios de miseria obligan a sus trabajadores a vivir prácticamente en el camión, afectando muy seriamente a su vida familiar y a la propia salud e integridad física por vulnerar no sólo las leyes laborales, sino también la normativa de tráfico”.
Por todo ello, los dos sindicatos reclamaron un aumento de salarios y el cumplimiento “riguroso” de los tiempos de conducción y descanso, con “alojamientos dignos costeados por la empresa, y vacaciones remunerada”, tal y como recogen los convenios colectivos de aplicación y las leyes.
Además pidieron una reducción de jornada y de la edad de jubilación, una inspección “eficaz”, con un “plan concreto” contra el “dumping social” y la ilegalidad de las empresas, la prohibición de falsos autónomos y de los contratos de alquiler de vehículos sin conductor, el fin de la precariedad laboral, la conciliación de la vida profesional y familiar, medidas para reducir la siniestralidad, la prohibición del pago por kilómetros recorrido, una mayor vigilancia del “cabotaje ilegal “y la prohibición “real” de carga y descarga por el conductor.