Es un hecho, y no solo en la especie humana, que las hembras viven más que los machos. Por ello, a lo largo de los años se han llevado a cabo diferentes estudios para tratar de esclarecer por qué la masculinidad está asociada a una menor esperanza de vida.
En buena parte de las especies, incluyendo a los humanos, las hembras cuentan con una mayor esperanza de vida. Por ejemplo, según datos del Banco Mundial, las mujeres viven de media 5,2 años más que los hombres en los considerados como países ricos, y 3,8 años en los pobres. El diario El País se ha hecho eco de esta cuestión y ha recopilado diferentes análisis al respecto, con el fin de determinar cómo y por qué los hombres viven, por término general, menos que las mujeres.
Una investigación de 2021, publicada en la revista científica ‘PNAS’ mostró, tras analizar 101 especies animales, que los machos vivían un 18,6% menos que las hembras. En cuanto a los humanos, esta diferencia se reduce hasta el 7,8%. Para explicar esta diferencia debe atenderse tanto a factores biológicos, como a la interacción con el entorno.
Respecto a los primeros, se ha demostrado que, mientras que los estrógenos suponen una serie de beneficios como reducir el colesterol malo y aumentar el bueno, la testosterona hace lo contrario.
Además, los andrógenos que pueden hacer crecer rasgos como una gran cornamenta o musculatura conllevan un sistema inmune más débil.
Finalmente, también se ha demostrado que poseer dos cromosomas X (mujeres) es más ‘seguro’ que la combinación XY (hombres), ya que, cuando se producen defectos en un cromosoma X, el otro lo cubre con la región idéntica. Sin embargo, en los hombres, el cromosoma Y no siempre puede hacer eso.
En lo referente a la interacción con el entorno, la mayor impulsividad y la búsqueda de sensaciones fuertes supone una cuestión importante en la mayor mortalidad masculina.
Asimismo, ciertas prácticas como el tabaquismo o el consumo de alcohol y drogas han estado siempre más asociadas a los hombres.
También, algunos expertos han señalado que las hembras “necesitan más tiempo para tener más crías y darles el cuidado que necesitan”.