Policía Nacional de Salamanca detuvo a dos mujeres de 18 y 55 años y a un varón de 58 años por la comisión de un delito contra la propiedad.
La actuación policial se inició cuando en dependencias policiales se recibió una llamada desde un supermercado ubicado en la zona de Puente Ladrillo, en la cual y según los requirentes tenían a dos mujeres retenidas por haber hurtado diversos productos en el local.
A la llegada de los actuantes se entrevistan con la alertante, la cual explica cómo había sorprendido a dos mujeres intentando abandonar el establecimiento sin abonar los productos que habían introducido previamente en una bolsa.
La denunciante comentó a los policías que se dirigió a las mujeres para recriminarles su comportamiento, y al intentar retenerlas, la mujer más joven la había agredido, zarandeándola por el cuello y arañándole en brazos y manos, mientras era ayudada por la otra mujer, que empujaba y agarraba a la trabajadora, y que debido a tal proceder habían conseguido huir del lugar, aunque sin el botín.
Junto con otra trabajadora facilitan las características físicas de las autoras, así como la matricula de un turismo en el cual se introdujeron las dos mujeres a la carrera, y exponen que huyeron del lugar a gran velocidad poniendo en peligro a otros usuarios de la vía.
Abuela y nieta
La información recibida es transmitida al resto de los vehículos policiales en servicio; localizando instantes después a la furgoneta, siendo interceptada e identificado el conductor. En el registro del turismo, que llevaron a cabo los agentes, localizaron en el maletero diversos productos de distintas tiendas del centro comercial de Capuchinos, todos nuevos y con sus correspondientes etiquetas. Al ser interpelado por la procedencia de los objetos, no ofreció ninguna explicación convincente, ni aportó ticket de la compra de los mismos.
Otro de los vehículos policiales, observa a dos mujeres que coinciden plenamente con las características facilitadas por las trabajadoras del supermercado, que al advertir la presencia policial, emprenden la huida a la carrera, siendo interceptadas por los agentes. Preguntadas por los hechos, reconocen voluntariamente haber tenido un problema en un supermercado cercano y el haber agredido a una empleada.
Los actuantes realizan gestiones y descubren que las dos personas de mayor edad son matrimonio y que la joven es nieta de la mujer.
Por todo ello, y al entender los actuantes de Policía Nacional que se encontraban ante la comisión de un delito de robo violento en el que habían participado las tres personas, aunque con distinto grado de autoría proceden a su detención.
Los responsables de los negocios del Centro Comercial de Capuchinos en los que se habían producidos los hurtos de los productos encontrados en la furgoneta, al ser citados a Comisaría reconocieron en cada caso sin ningún género de dudas los artículos como pertenecientes a sus establecimientos.
Una vez finalizados los trámites en dependencias policiales, se dio cuenta al juzgado en funciones de guardia.