Los vándalos nocturnos dejaron su huella este domingo de madrugada al pasar por una céntrica plaza de Salamanca.
Una de las jardineras de la Plaza de la Libertad ha aparecido apeada de su peana y una de las asas arrancadas.
La muesca de la base de la jardinera indica que ha sufrido una caída y no es probable que haya sido por el efecto del viento.
Eso sí, han sido tan considerados que han dejado el asa partida allí mismo para no falte nada.
Esta ha sido una de las incidencias de una noche en la que los agentes de la Policía Local detectaron a las 2.39 horas un conductor con una tasa de alcoholemia positiva en el Paseo Carmelitas, alcoholemia positiva, otra del mismo tenor a las 5:43 horas en la calle Norte y tuvieron que acudir a varios avisos por molestias ocasionadas por ruidos de fiestas, aunque no sobrepasaban el máximo de decibelios permitido.