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Opinión

Yoga y compañeros de piso

Una persona practica yoga con su perro al lado. Imagen. de Bata Stojanovic en Pixabay

Bienvenido a esta columna con la que vamos terminando el mes de octubre. Y después de un fin de semana en compañía perruna, me apetecía hablar sobre ellos: nuestros compañeros de piso, esos que dejan cuatro huellas al caminar. Animales y yoga.

Muchos de los yoguis que aquí estamos, compartimos o hemos compartido tiempo y vida con nuestros gatos o perros. Son muchas las veces que os veo en la pantalla practicando con vuestro perro al lado. Me encanta como hacemos malabares para poder hacer la postura de la cobra cuando la esterilla está ocupada por estos hermosos seres.

Yo he tenido la fortuna de compartir todo esto durante dieciocho años con Juana, mi compañera gatuna del alma. Y recuerdo divertido practicar siempre con ella por allí. Merodeaba durante toda la práctica y en savasana se quedaba cerquita disfrutando el momento de relajación profunda.

A veces no es tan divertido (risas) cuando en tu postura de la plancha te tienes que quedar arriba porque tu mat está ocupado con Juana peinándose con su lengua rosa.

Tenemos mucho que aprender de los animales, pero mucho. En mi caso hablo de la filosofía gatuna que es la que conozco. Estos seres de bigotes divertidos, son los llamados grandes meditadores. Se colocan en la postura tranquilamente y se pueden quedar meditando un buen rato, y esto lo hacen muy a menudo varias veces al día. Y es que, si lo has podido observar, es un gusto…; y si no lo has podido observar, te invito a ello.

Al felino, o la felina en mi caso…, mi Juanola, cuando la miraba, estaba disfrutando del aire que le roza la cara justo en este instante, el momento de estar ahí. Y no tienen nada que hacer. No necesitan hacer planes.

Incluso hace poco han sacado (y todas hemos bailado) una canción dedicada a la vida relajada de una perra con la famosa Rigoberta. Insisto, tenemos mucho que aprender de la naturaleza animal.

Los animales, hablamos de perro y gato, que es lo que conozco, son mucho más sensibles que nosotros en muchos aspectos como el olfato, las impresiones y la energía. Y por eso les encanta cuando tú practicas yoga, porque sienten todos esos beneficios del yoga:

  • Relaja el sistema nervioso y tu perro lo nota.
  • Ralentiza la respiración y tu gata lo siente.
  • Facilita la calma y a tu perra le encanta.
  • Aumenta tu felicidad y tu gato lo celebra.
  • Tu cuerpo está más ágil y ellos lo disfrutan.
  • Tu cabeza está más presente y es un gusto pa

Por todo esto y mucho más, seré sencilla en el mensaje:

“PRACTICA YOGA, él siempre lo haría.”

Dedicada a toda la gente yogui que comparte esterilla con otras cuatro patitas, y con toda mi alma a Juana por todos los años que nos divertimos en la esterilla y fuera de ella.

Que tengas un buen día y cuides tu energía.

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