La Audiencia Provincial de Salamanca ha condenado a la exalcaldesa de Béjar a dos años de cárcel por coaccionar a dos policías para que no intervinieran en la fiesta de los hijos de un concejal durante las restricciones por la pandemia.
La pena, que no motivará su ingreso en prisión al no superar los dos años y carecer de antecedentes, incluye la inhabilitación especial para el derecho al sufragio pasivo durante el tiempo de la condena, e inhabilitación especial para empleo o cargo público, referido al cargo de alcalde o de concejal durante el tiempo de la condena.
En materia de responsabilidad civil indemnizará con 1.500 euros a cada uno de los dos agentes de la Policía Local que intervinieron en la fiesta por los daños morales producidos.
La Audiencia la absuelve del delito de prevaricación administrativa del que ha sido acusada en el presente procedimiento, por la acusación particular.
Los agentes acusaron a Martín de presionarlos para que no tramitaran las denuncias contra los dos hijos del concejal del equipo de Gobierno que participaban en una fiesta ilegal en tiempos de restricciones por la pandemia.
Los muchachos avisaron a su padre y este a la alcaldesa, que se presentó en el lugar de los hechos coaccionando a los agentes, como concluye la sentencia.