Juan Chacón, mexicano afincado en Salamanca, pasea por entre las calaveras que conforman la exposición Mexicráneos, que estos días se pueden ver en la Plaza del Liceo.
Para los mexicanos la cultura de la muerte es diferente. “La muerte es un festejo a nuestros ancestros. No es esa sensación de que lo pierdes y vas a un entierro. En nuestro país siempre piensas que esa persona está en un lugar mejor”.
En México el 1 y 2 de noviembre se rinde culto a la memoria de los muertos. Durante ese día son varias las ofrendas y las costumbres que se llevan a cabo en el país azteca. “El Día de los Muertos invitas a tus difuntos que vengan a tu casa a cenar. Les pones la comida tradicional. Sobre todo los platos favoritos de esos parientes fallecidos que quieres que vengan. En teoría pasas esa noche en vela esperando a que recuerden que han venido a estar con la familia”, apunta Juan Chacón.
Uno de los símbolos más representativos de este día es la calavera mexicana. Chacón explica que “simboliza lo que es el paso al otro mundo. La muerte no conlleva un hecho malo”.
En relación a la decoración de estos elementos señala que “depende del ambiente festivo. Está muy relacionado con la tradición emocional de los colores. Por ejemplo: el azul indica tristeza, el negro miedo, el blanco alegría y el rosa amor. La calavera se hace de azúcar. Te la comes para asegurarte de que esa persona sigue dentro de ti”.
Además, existe otra creencia. “La idea del sol y la luna como ente único. Es la fusión que marca la muerte. Pero no se basa tanto en constelaciones o astros como aquí”, puntualiza.
Durante ese día se hacen varias ofrendas. “Se ofrece pan de muerto. Es un tipo de pan específico que se hace para ese mismo día. También hacemos un pequeño altar con las fotos de las personas a las que estas recordando ese día. Ahí se va dejando el pan de muerto. Es como aquí la bollería. Sería como una especie de cuerpo para la calavera”, matiza Juan Chacón.
En cuanto a la exposición afirma que “es parte de un intercambio cultural. Siempre tenemos una idea de distanciamiento cuando lo que hay que tener es un acercamiento. En este caso del habla hispana y la América Latina. Estamos en momentos de no solo conocer la cultura sino de entenderla”, concluye Juan Chacón.