Perder a un ser querido es un proceso complicado y son muchas las decisiones que hay que tomar. Qué hacer con el cuerpo es una de las principales cuestiones a las que enfrentarse en ese momento.
Las opciones que hay son la inhumación y la incineración. Según datos de la Asociación Nacional de Servicio Funerarios la incineración es la opción escogida por más del 41% de los fallecidos en España. Salamanca no es ajena a esta tendencia.
La funeraria Santa Teresa realiza cremaciones en la ciudad de Salamanca. Además, ofrece otros servicios como el entierro tradicional o los traslados nacionales e internacionales.
Un representante de la funeraria asegura que las incineraciones en la provincia charra han aumentado. Él señala que “ahora hay más incineraciones. Esto ha sido a raíz de la pandemia. Con la covid-19 se disparó el aumento de las incineraciones”.
Además, esta tendencia no es algo que se haya notado solo en la ciudad de Salamanca. El resto de pueblos de la provincia también se decantan cada vez con menos reparos por la incineración.
Sin embargo, la pandemia no ha sido el único factor que ha hecho que esta tendencia aumentase. Hay otros motivos por los cuales la gente elige la incineración. “La mentalidad y la forma de pensar ya no son las mismas de antes. Lo tradicional ya ha pasado. La gente incinera porque luego las cenizas ya son custodiadas por la familia. Además, el tema de los cementerios ya no está tan presente”, asegura.
Señala que el factor económico por las sepulturas puede tener algo de relevancia a la hora de escoger esta opción. Sin embargo, en relación a los precios explica que “van un poco a la par. No hay mucha diferencia”.
Otros aspectos como la edad también influyen a la hora de tomar esta decisión. Desde la funeraria Santa Teresa aseguran que “la gente más joven va tirando más por la incineración que por el entierro tradicional. Ellos ahora piensan de otra forma”.
En cuanto a las ventajas de la incineración resalta, sobre todo, la garantía de tener las cenizas. El empleado de Santa Teresa comenta que “la principal ventaja es que una vez que se incinera las cenizas pasan a ser custodia suya. Las puedes llevar a tu casa, esparcir en el jardín, en la playa… Las tienes tú recogidas en lugar de estar en el cementerio”.
Cuando tienes las cenizas bajo tu custodia tú decides qué quieres hacer con ellas. Hay quienes se decantan por depositarlas en un columbario en el cementerio, quienes prefieren tenerlas en casa y quienes deciden esparcirlas en un lugar significativo. Sin embargo hay sitios donde está prohibido.
“No se pueden esparcir en sitios públicos. En tu jardín lo puedes hacer, pero no en un sitio público como por ejemplo, la Plaza Mayor de Salamanca. Ahí evidentemente no se puede. Si es un sitio público antes hay que asegurarse de que se pueden esparcir ahí”, comenta.
