El exvicepresidente y procurador de Ciudadanos Francisco Igea solicitó este miércoles la comparecencia urgente en las Cortes, a ser posible esta misma semana, del consejero de Sanidad, Alejandro Vázquez, ante la epidemia de bronquiolitis infantil y la “saturación” hospitalaria. Además, reclamó que informe de los planes de contingencia previstos al respecto.
Ical.- La incidencia semanal de las bronquitis y bronquiolitis alcanza en Castilla y León una tasa de 983 casos por cada 100.000 habitantes entre los menores de cinco años. No obstante, entre la población general, la incidencia ajustada por edad es muy inferior, con 61 casos, según los datos consultados por Ical del Programa de Vigilancia de las Infección Respiratorias Agudas (IRA), correspondientes a la semana del 14 al 20 de noviembre.
En ese sentido, la Consejería de Sanidad informa de que en la pasada semana se observó un “repunte” de la incidencia de las infecciones respiratorias, debido principalmente al aumento de las bronquitis y bronquiolitis. Por el contrario, los síndromes gripales y el COVID-19 están estabilizados.
En un mensaje facilitado por Cs, Francisco Igea consideró que Vázquez debe explicar a la mayor brevedad posible en la Comisión de Sanidad de las Cortes cuál es la situación real de las unidades de hospitalización y de cuidados intensivos pediátricas ante esta epidemia de bronquiolitis infantil.
Además, el dirigente ‘naranja’ exigió al consejero de Sanidad que informe de las medidas adoptadas para evitar que se saturen las urgencias, que se colapsen los hospitales. “Es urgente que el consejero presente a los representantes te de la ciudadanía, cuál es su plan de actuación en este momento si es que hay alguno”, dijo.
“Ayer solo vimos la declaración del presidente de la Comunidad de que como pudimos con el COVID, pues podremos con esto. Hombre no parece exactamente un plan. No parece que estén ocupados en presentar a los ciudadanos qué medidas concretas, qué planes de contingencia, con qué camas, con qué profesionales contamos o cómo vamos a gestionar la Atención Primaria de estos casos para evitar la saturación de las urgencias”, concluyó.
El consejero
Por su parte, el consejero de Sanidad, Alejandro Vázquez, lanzó en Valladolid un mensaje de tranquilidad a la ciudadanía ante el repunte de la incidencia de la bronquiolitis por que subrayó que, hasta la fecha, no ha sido necesario implantar planes de contingencia en los hospitales de la Comunidad. “Hay una incidencia elevada de bronquiolitis, pero no es algo nuevo aunque ha habido varios años en que hubo pocos casos por la evolución de la pandemia del COVID”, expuso.
Con motivo de la inauguración de la I Jornada de Innovación en Salud en Castilla y León: ‘Innovación en el ámbito hospitalario como palanca de generación de valor’, que tuvo lugar en el Hospital Universitario Río Hortega de Valladolid, Vázquez precisó que todos los centros cuentan con planes de contingencia para, si fuera necesario, transformar su actividad para dar servicio a los pacientes que requieran ingreso o cuidados intensivos, tal y como quedó demostrado durante la pandemia del COVID. En este sentido, aseguró que no hay una repercusión asistencial “demasiado alta”, salvo en los servicios de Urgencias y Atención Primaria.
El consejero recordó, según recogió la Agencia Ical, que los planes de contingencia permiten adaptar el hospital a las necesidades que haya en cada momento como aumentar el número de camas de Intensivos o de hospitalización y reforzar el personal sanitario de las Urgencias para atender un mayor incremento de casos de Pediatría.
Alejandro Vázquez reconoció que la incidencia de la bronquiolitis no es igual en todas las provincias de la Comunidad, ya que se registran más casos en Valladolid que en otros lugares. En todo caso, pese a señalar que el nivel de las Urgencias es “importante”, destacó que en los hospitales no es aún alto, por lo que no ha sido necesario realizar adaptaciones destacables.
El jefe de Unidad de Pediatría del Río Hortega, Carlos Alcalde, apuntó que la bronquiolitis es la “misma” que la de todos los años, con cuadros de infecciones víricas que provocan dificultades respiratorias en los lactantes y los niños de menos edad, sobre todo entre los menores de seis y tres meses. En este sentido, destacó que lo más importante es identificar los signos de alarma de dificultad respiratoria como que el niño respire muy deprisa, se le marquen las costillas y falta de apetito.
En estos casos, precisó es necesario acudir, “sí o sí”, a los servicios de Urgencias hospitalarios o al pediatra, sobre todo en los bebés con menos de un mes para evitar posibles complicaciones. Por el contrario, cuando el niño está bien y no hay dificultad respiratoria, hay menos urgencia, pese a reconocer que es un virus que se extiende “mucho” e incluso se contagia a hermanos mayores. De ahí que hiciera hincapié en la prevención como el lavado de manos, el uso de la mascarilla y el aislamiento para evitar contagios.