¿Se puede permitir España un desastre cultural, ecológico y económico como el de la Flecha de Fray Luis de León, Miguel de Unamuno y otros muchos grandes poetas cuando fue llamado el Parnaso Ibérico?
«Salamanca, capital mundial de la poesía»: El espíritu de Don Miguel sigue vivo.
Ideas pare recuperar esos más de 122.000 salmantinos que han tenido que emigrar a otras provincias por no encontrar en su tierra oportunidades para desarrollar su talento.
Sin lugar a dudas Salamanca puede ser fácilmente de nuevo esa luz que atraiga a miles de poetas, escritores y personas de letras fácilmente ya que durante más de cinco siglos ha sido el faro que marcó la literatura en español…y otras lenguas.
¿Qué tal una semana grande para la poesía aprovechando la entrega del premio Reina Sofía de poesía Iberoamericana?
Evidentemente, ello implicaría la colaboración máxima entre el Ayuntamiento de Salamanca y las Universidades de Salamanca además de los grupos literarios que ahora llenan las bibliotecas públicas y centros privados como bares en los que la poesía y la música van de la mano. Sin olvidar esos buenos escritores que viven aún con nosotros y cada poco tiempo hacen nuevas publicaciones.
Por supuesto, que un requisito imprescindible sería que la entrega del premio más famoso en poesía española se entregara en Salamanca en una ceremonia como nos han enseñado en Asturias con la entrega de los premios Príncipe de Asturias.
Tenemos de todo, grandes edificios históricos bien rehabilitados, Palacio de Congresos y Exposiciones, hoteles, restaurantes, pubs y bares de alta calidad y una ciudad poética como ninguna otra.
Esto nos daría visibilidad de nuevo para atraer a estudiantes a la Universidad y a poetas y escritores para hacer crecer nuestra población y hacer de Salamanca esa ciudad tan alegre de la que el mismísimo Cervantes hablaba.
Además de todo ello, cada año, en cada edición, engrandecer Salamanca y provincia y distrito universitario con nuevos espacios culturales específicos como puede ser la Flecha, ahora llena de hormigón y maleza cuando bien pudiera ser el Parnaso Ibérico.
Queridas autoridades municipales y universitarias, si esto cayera en terreno abonado, Salamanca podría recuperar de nuevo el tiempo perdido ya que hemos retrocedido en población y economía un siglo y no podemos perder otro, seríamos ingratos con aquellos que nos dejaron tan rica herencia.
¿Hablamos?
Por. José Luis Salamanca.