Los seguidores más fieles de Depresión Sonora han aguantado estoicamente los casi cero grados de temperatura para ser los primeros en atravesar las puertas de la sala de concierto Potemkim y poder ‘tocar’ a su ídolo.
Marcos Crespo es el que está detrás del proyecto musical de Depresión Sonora. Comenzó a subir sus canciones a la red allá por mayo de 2020, quizá aprovechando que medio mundo estaba encerrado en sus casas. De hecho, su primero concierto fue ‘pandémico’.
Aprovechó muy bien el tiempo en su casa. Su música comenzó a sonar y a gustar. Los entendidos aseguran que Depresión Sonora tiene influencia del post-punk ruso y del pop comercial. En sus canciones se escuchan guitarras y baterías, instrumentos muy clásicos para una música que llega.