El Ayuntamiento de Salamanca recibirá 3.575.427 euros de los fondos europeos para la recuperación, para destinarlos a un proyecto indefinido para fomentar su conversión en un destino turístico sostenible, cuando la ciudad en sí no lo es.
El Ayuntamiento presentó su solicitud pidiendo el dinero para un plan que «se centra en impulsar la transición del destino turístico Salamanca para su incorporación en las nuevas agendas de sostenibilidad y digitalización, con el fin de responder a las demandas y nuevos comportamientos de los viajeros».
O sea, que lo mismo servirá para colocar más macetas en las farolas con un sistema de riego digital y jardineras estorbando en las calles peatonales que para ampliar el carril bici en el extrarradio los próximos veinte años (el del centro ya parece estar completado), o poner plantas en las terrazas ampliadas de los bares mientras metemos los autobuses de los turistas en el centro, o al lado. O para no hacer nada significativo, que es la marca de la casa desde hace varias décadas.
El caso de Salamanca no es único, porque los otros 14 proyectos de Castilla y León aprobados por el Gobierno para recibir cuantiosa financiación europea son igual de difusos.
Castilla y León recibirá más de 51 millones euros para el desarrollo de los proyectos aprobados en la región. En total, el Gobierno invertirá 720 millones de euros de los fondos Next Generation EU en materia de sostenibilidad turística.
En su reunión de este miércoles, la Conferencia Sectorial de Turismo ha aprobado definitivamente un total de 196 proyectos de sostenibilidad turística en destino para todas las comunidades autónomas, de los que 175 serán gestionados por las entidades locales beneficiarias y 21 corresponden a acciones de cohesión que desarrollarán las propias autonomías y también tendrán impacto en destino.
