Un prometedor desarrollo de la NASA podría cambiar el futuro de los viajes, reduciendo a la mitad los tiempos de vuelo. Se trata de un avión supersónico que promete reducir considerablemente la duración del trayecto, minimizando además el ruido para que pueda sobrevolar ciudades.
La elevada duración de algunos trayectos en avión supone uno de los principales motivos para que algunos rechacen la opción de hacer ciertos viajes. No obstante, la NASA se encuentra desarrollando un avión supersónico que promete reducir tanto los tiempos de vuelo como los ruidos de la aeronave, permitiendo así que pueda sobrevolar ciudades.
Aunque los aviones supersónicos son algo de lo más común en el ámbito militar, en el civil es algo prácticamente desconocido. El único servicio supersónico para el transporte de pasajeros fue el Concorde, activo entre los años 1976 y 2003. Sin embargo, los elevados costes y ruidos de esta aeronave acabaron con ella.
Ahora la NASA, dentro de su ‘misión Quesst’ se encuentra desarrollando el prototipo X-59. Este avión de investigación busca mitigar el enorme ruido que provocan las aeronaves supersónicas, con lo que se le permita sobrevolar ciudades. En cuanto a la velocidad, se prevé que alcance Mach 1.4 (1.728km/h) volando a una altura de 16.800 metros. Para ello contará con el motor F414-GE-100.
El proyecto estadounidense busca aportar datos para hacer de los vuelos supersónicos una realidad en un futuro no muy lejano. De esta manera, esperan “reducir de forma drástica” los tiempos de viaje. Así, este 2023 tendrá lugar la primera operación. Tras un año y medio de pruebas sobre rendimiento y seguridad, entre 2025 y 2026 se llevarán a cabo seis pruebas comunitarias en EEUU, entregándose los datos en 2027.