Un conductor bebido protagonizó un espectacular accidente este viernes de madrugada en la Gran Vía de Salamanca.
Poco antes de las dos de la madrugada circulaba por la zona y se encontró con un control dela Policía Local y al tratar de esquivarlo se empotró contra la valla de protección que hay en la esquina de Gran Vía con Canalejas.
Tras la colisión hubo que levantar varios metros de vallado (casi toda la que da a la Gran Vía, porque había quedado en mal estado y podría ocasionar algún accidente.