El precio del oro lleva varias semanas encadenando importantes subidas, lo que ha supuesto la racha al alza más larga desde agosto de 2020. Esto se debe, entre otras cuestiones al creciente interés en dicho metal por parte de bancos centrales, minoristas e inversores institucionales.
En las últimas semanas bancos centrales, minoristas e inversores institucionales han fijado sus miradas en el oro, lo que ha supuesto que el precio de este metal precioso haya experimentado la racha de subidas más larga desde el mes de agosto de 2020.
Entre los motivos, destaca el fin de la política Covid cero en China, que ha acabado con las restricciones fronterizas en el país asiático. En este sentido, cabe mencionar que los chinos constituyen uno de los principales compradores de oro físico del mundo.
Por otro lado, en el mercado se considera que la Reserva Federal de Estados Unidos ya habría llevado a cabo la mayor parte de subidas de tipos, por lo que se aproximaría una pausa. Esta cuestión ha llevado a dos cosas. En primer lugar, a arrastras los tipos de interés de la deuda pública estadounidense, haciéndola menos atractiva. En segundo lugar, la depreciación del dólar, lo que hace más barata la compra de oro por parte de inversores extranjeros.
Finalmente, entran en escena los bancos centrales, que llevan meses aumentando sus compras de oro con el fin de reforzar sus reservas. De esta manera, en el último trimestre de 2022 alcanzaron un récord histórico.