Cofely, la empresa para la que conseguía contratos públicos la trama corrupta encabezada por Francisco Granados, exnúmero dos de Esperanza Aguirre, no realizó ningún proyecto financiado por la Junta en Salamanca.
Así se desprende de las explicaciones ofrecidas este jueves por el consejero portavoz, José Antonio de Santiago Juárez, al término del Consejo de Gobierno.
La Junta habría pagado a Cofely 5,7 millones de euros entre 2002 y 2014 en los expedientes de las consejerías de Sanidad, Presidencia y Fomento y Medio Ambiente. A esa cantidad habría que sumar un contrato de la sociedad pública Somacil y la Universidad de Valladolid para poner en marcha una Red de Calor, adjudicada por 7,5 millones y financiada a través del Banco Europeo de Inversiones (BEI).
De Santiago Juárez resaltó que ninguno de los proyectos financiados por la Junta está siendo investigado por la Audiencia Nacional, y precisó que la mayor parte de ellos son contratos de mantenimiento de calefacciones, refrigeración y energía, la mayoría de ellos localizados en Valladolid y Ávila.
Medina del Campo
La Consejería de Sanidad pagó 4,5 millones a Cofely para el mantenimiento de la climatización, obras suministros del centro sanitario de Medica del Campo.
De Santiago Juárez insistió en las palabras pronunciadas la víspera por el presidente, Juan Vicente Herrera, y añadió que «hay que atajar el problema de la corrupción caiga quien caiga y se lleve por delante a quien se lleve».
