Saloro sigue avanzando en la incorporación de la mujer en la mina de wolframio de Barruecopardo, donde ya está presente en todas las áreas de actividad de la compañía.
El 23% de la plantilla de la empresa son mujeres, un porcentaje muy elevado en comparación con la media de la minería, donde solo representa el 6% de las plantillas.
Saloro cuenta con una plantilla propia de 124 trabajadores, de los que 28 son mujeres. De ellas, 22 viven en las comarcas de Vitigudino y el Abadengo y la incorporación de la mujer forma parte del compromiso de Saloro con la igualdad de género y de condiciones laborales entre hombres y mujeres.
La edad de las mujeres que trabajan en la mina de wolframio de Barruecopardo es de 19 años, la más joven, mientras que la más veterana tiene 54.
La mujer está presente en los distintos departamentos de la compañía, desde planta, laboratorio, mantenimiento, administración, geología, servicios centrales, mina hasta medio ambiente.
Además, cuatro mujeres ocupan cargos de responsabilidad dentro de la compañía. Así, una mujer es la presidenta del comité de empresa; una ingeniera química es la responsable de gestión y calidad del agua; una ingeniera industrial se encarga de la seguridad y una graduada en ADE es la jefa de Administración de Saloro.
“Estamos muy orgullosos, pero no satisfechos. Queremos que la plantilla siga creciendo y nos gustaría incorporar a más mujeres. Tenemos que cambiar el concepto que se tiene de la minería. En la actualidad, los trabajos que se realizan en Saloro los puede ejecutar un hombre o una mujer”, puntualiza Agne Alhenius, consejero delegado de Saloro.
El camino hasta llegar aquí ha sido duro. “Saloro comenzó a trabajar en Barruecopardo hace casi 20 años, en 2004, y a lo largo de estas dos décadas, hemos conseguido ser la segunda mina más grande de Europa y la única compañía de minería metálica trabajando en Castilla y León”, apunta Agne Ahlenius, consejero delegado de Saloro.
El yacimiento en Barruecopardo es uno de los mejores de Europa y produce entre el 10 y el 12% de wolframio mundial, no procedente de China, líder de producción de este mineral con el 85% de la cuota de mercado global. Precisamente, la UE calificó el wolframio como uno de los minerales estratégico, porque cualquier un país en desarrollo o en vías de desarrollo lo necesita.
Sobre Saloro. Saloro trabaja en Barruecopardo desde 2010. Durante este periodo ha obtenido los permisos administrativos para poner en marcha la mina, algo que ocurrió a finales de 2019, y que se vio truncado por la pandemia y el parón de la economía mundial en marzo del 2020. En la actualidad, ya reanudada la actividad productiva la mina da empleo directo a 187 personas y genera otros 200 puestos de trabajo indirectos.