UBS, el principal banco de Suiza, ha comprado el Credit Suisse por 3.000 millones de euros con el aval del Gobierno suizo. Esa cantidad equivale al 40% del valor que tenía el viernes el banco absorbido (8.000 millones), tras dos sesiones fuertes pérdidas.
«Es una solución apoyada por el Gobierno, que garantiza las condiciones marco para su éxito», ha dicho el presidente de Suiza, Alain Berset, en rueda de prensa desde el Palacio Federal de Berna.
«La situación es conocida, Credit Suisse es uno de los 30 bancos sistémicos a nivel mundial. Es uno de los dos principales bancos del país. Por lo tanto, no solo es decisivo para Suiza, para nuestras empresas, para los clientes privados, para sus propios empleados, sino también para la estabilidad de todo el sistema financiero», ha añadido Berset.
Los accionistas de Credit Suisse recibirán una acción de UBS por cada 22,48 acciones de Credit Suisse, lo que equivale a valorar los títulos de la entidad absorbida en 0,76 francos suizos. El viernes, los títulos del Credit Suisse valían 1,86 francos suizos, hace un mes cotizaban a 2,77 francos y hace cuatro meses a 4,64 francos, seis veces de lo que pagará UBS para quedárselo.
“Acojo con beneplácito la acción rápida y las decisiones tomadas por las autoridades suizas. Son fundamentales para restaurar las condiciones ordenadas del mercado y garantizar la estabilidad financiera”, dijo Christine Lagarde, presidenta del Banco Central Europeo.
“El sector bancario de la zona del euro es resistente, con fuertes posiciones de capital y liquidez. En cualquier caso, nuestro conjunto de herramientas de política está completamente equipado para brindar apoyo de liquidez al sistema financiero de la zona del euro si es necesario y para preservar la transmisión fluida de la política monetaria”, añadió.