Se jubila un quiosquero de toda la vida

Lleva casi cuatro décadas en la Isla de la Rúa
Félix Crego Navarro en su quiosco

Después de casi cuarenta años dentro del quiosco de la Isla de la Rúa, Félix Crego Navarro se jubila y traspasa el negocio. De sus 37 años despachando prensa, cromos o chucherías, el quiosquero reconoce llevarse, sobre todo, el sentirse querido y apreciado por muchos de los clientes que han pasado por allí. 

Pena y nostalgia son quizá las dos palabras que más ha repetido Félix en su conversación con La Crónica de Salamanca con motivo de su cercana jubilación. Este salmantino ha ocupado el quiosco de la Plaza Isla de la Rúa durante casi 37 años, y ahora traspasa el negocio debido a su retirada.

Sus casi cuatro décadas de cara al público le han dejado “muy buenos ratos”, así como amistades y clientes por los que asegura, “haría cualquier cosa”. Sin embargo, ha sido mucho tiempo el que ha tenido que dedicar al quiosco, por lo que también espera con ganas su nueva vida y su “merecido” descanso.

¿Ha cambiado la vida del barrio desde que abrió el quiosco?
Muchísimo. Por ejemplo antes, cuando pasaban por aquí todos los estudiantes tenía otro ambiente. Ahora lo que hay es más turismo, desde 2017 no ha habido tanta gente como ahora.

¿Y el negocio?
En nuestro gremio se ha notado sobre todo el tema del periódico, que ha bajado las ventas. A mí antes, por ejemplo, me llenaban el arcón de El País y lo tenía que guardar en un hotel. De estar vendiendo ciento y pico periódicos de El País un domingo, he pasado a vender unos treinta y cinco o cuarenta. Pero bueno, ahora también se venden otros productos.

¿Cuál fue la mejor etapa?
Cuando cogí el negocio, en el año 1986, hasta el 1990 aproximadamente. También fueron buenos tiempos cuando se celebraron las Edades del Hombre, la Capital Cultural… Ahora, aunque incluso hay más gente, en este negocio antes se vendía más. De llegar a haber 42 quioscos en Salamanca, ahora quedamos 15.

¿Qué revistas y periódicos de los que ha vendido ya no están?
Interviú, Tiempo, El Adelanto, Tribuna de Salamanca, muchos periódicos de informática… Han desaparecido muchos. Muchísimos.

¿Qué pérdida echaron más de menos los clientes?
¡Hombre!, El Adelanto. Fue de los más longevos… En cuanto a revistas, Interviú.

¿Tienen futuro los quioscos?
Sí. De momento quedamos poquitos, pero estos de calle, si los enfocas y metes productos dan para comer. Por ejemplo, este en concreto, si lo pudiera coger un matrimonio y lo lleva bien, da de sobra para comer. Además, el sitio en el que está ubicado es de los mejores.

¿Es duro el trabajo de quiosquero?
Mucho. Es muy duro porque hay que madrugar mucho, echarle muchísimas horas… Es muy esclavo, hay que trabajar los fines de semana y los festivos. Los únicos tres días que no se trabaja, porque no hay prensa, son el Sábado Santo, Año Nuevo y Navidad. No se adapta cualquiera.

¿Cómo ha sido su experiencia?
Yo he tenido que adaptarme a esto porque antes no tenía otro medio de vida. Pero bueno, se va uno satisfecho y con nostalgia porque, aunque he sido muy esclavo, he pasado ratos muy buenos y agradables. Además, aquí vienen los clientes y me cuentan sus problemas, yo les cuento los míos. Y a mí, que me gusta mucho hablar, esto parece un confesionario… (Risas).

¿Cómo afronta la jubilación?
Ahora con el cambio no lo sé. Yo me voy y me da nostalgia. Unos dicen que puede hacerse duro, pero también llega la hora de parar y descansar. Después de tantos años y tanto tiempo aquí, me merezco un descanso.

¿Echará de menos el quiosco?
Sí. Me costará, primero, el adaptarme al cambio de vida. También echaré de menos el trato con los clientes. ¡Son tantos años…! Pero bueno, a todo se adapta uno, igual que me adapté en su momento a esto, ahora me haré a lo nuevo. También dejaré de estar atado todos los días.

¿Qué sentirá cuando pase por delante de la que ha sido su segunda casa durante casi cuatro décadas?
Sentiré nostalgia. Al pensar en los años que he estado aquí, me dará mucha pena también, pero todo llega en la vida. A fin y al cabo, te vas con mucha gente que te aprecia, gente muy buena. Yo haría por ellos lo que hiciera falta, porque hay clientes muy agradables y personas muy muy buenas. En ese sentido me voy muy satisfecho.

Cuéntenos alguna anécdota para terminar
Han pasado anécdotas de todo tipo. (Risas)
Por ejemplo, una vez vino un matrimonio aquí a comprar al quiosco y, después de comprar, se fueron y se dejaron olvidado a su hijo.
Cuando salió en El Jueves una portada con una ilustración de los actuales reyes Felipe y Letizia en la cama (en 2007 cuando el Gobierno de Zapatero anunció una ayuda de 2.500€ por hijo), la revista se agotó al momento. Vino hasta la Policía y todo para intentar quitárnoslas, pero ya no quedaban.

13 comentarios en «Se jubila un quiosquero de toda la vida»

  1. FÉLIX. TODA UNA INSTITUCIÓN EN EL BARRIO. Eficaz, amable, encantador, agradable, buen conversador, buena persona. Le echaremos de menos. A ver si e Kiosko permanece y ese suelo no pasa a formar parte del mal uso privado del suelo público, han desaparecido los bancos que había detrás, los poyos, y ahora los árboles parecen parte de algo privado y no lo son

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  2. Feliz jubilación para Félix, se lo merece. Todo ha sido atención, amabilidad y espíritu de ayuda para clientes y no clientes en estos años.
    Se le ha olvidado comentar que ha sido una «oficina de turismo» no oficial para todo el que se acercara a preguntar, o necesitara cualquier información sobre la ciudad.
    !Y siempre dispuesto a regalar «un caramelito»!
    Que disfrutes de esta etapa de tu vida.

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  3. Ayyyyy como te vamos a echar en falta Félix, has sido mi quiosquero de toda la vida, referencia de infancia y referencia como madre, punto de encuentro, siempre atento y optimista. Espero que sigas de paseante por la rua y su barrio antiguo para poder charlar y comentar lo que ha cambiado el centro. Tienes merecida tu jubilación. Un bsazo y nos vemos por los centros

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  4. Félix te echaremos mucho de menos cuando pasemos por tu quiosco,eres una persona muy servicial y muy buena persona.Te deseamos que tengas una jubilación muy buena porque te la mereces.Cuando pasemos por allí te recordaremos con cariño y ya no nos echaremos esos «parlaos» tan buenos.Un fuerte abrazo.

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  5. Merecida jubilacion Felix. Se te va a echar mucho de menos. Eres una persona encantadora, amable y servicial. Aunque todo ha cambiado, tu eres como el ultimo de Filipinas. Disfruta de un descanso merecido.

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  6. Ole ese Felix!! que gran tío y persona!! el mejor quiosquero que ha tenido Salamanca, lo conozco desde pequeño que pasaba por allí todos los días y le compraba las gominolas, nunca una mala cara y siempre dispuesto a todo.Pierde el barrio un punto clave de conversación.

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  7. Llega nuestra hija de Madrid y antes de entrar en casa ha ido a despedir a Felix, o sea, Félix es parte de la familia, su don de gentes, su generosidad indicando una y otra vez durante años distintas direcciones y lugares a personas q se acercan al quiosco a preguntar como si Félix fuera un punto de información… efectivamente siempre regala caramelos de menta como síntoma de agradecimiento a lo que se le compra, sea revista o periódico, Félix se va y su ausencia será nuestra ausencia, muchos vecinos se acercan allí a hablar de futbol, otros de las cosas de la vida diaria, del clima, del coste de la vida, … de todo. Siempre amable, oportuno, dispuesto, animado, positivo pero realista e informado. Gracias Félix y hasta siempre. Aquí nos dejas pero aquí nos tienes.

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  8. Por favor Ayuntamiento, nada de quitarmos ese trozo de suelo público que ocupa el quisco de Félix y repongan los bancos y asientos q habïa detras y nada de q ese rincón de la isla de la Rua sea un rincón privado a cambio de dinero de consumir bebidas y donde los vecinos no nos podamos sentar libremente, ese suelo de ese rincón es público y no privado. Feliz jubilación al maravilloso Felix

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  9. Aunque nunca le he comprado nada, me ha gustado verle en su quiosco, su cara y actitud de buena persona. Le deseo una feliz jubilación y le doy la enhorabuena por el valor y la voluntad que ha demostrado.

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  10. Gente asi, llena de paz y de alegria, quiero para mi Salamanca. Honrado y servicial ciudadano. Tranquilo y paciente observador del cada dia. Siempre acogedor a la tertulia de los vecinos (cada vez menos) que hasta alli acudian cada dia. Se fue el periodico, se fueron ellos. La vida se los va llevando. Queda el recuerdo y la imagen de otros tiempos, de otra calle, de otra ciudad, que nos han cambiado desde un despacho, quienes, cortos de miras, no han pensado mas que en sacar partido a lo inmediato. Feliz jubilacion Felix.

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  11. Te deseamos lo mejor en esta nueva etapa de tu vida, Félix. Con nuestro cariño y agradecimiento.
    Lástima que, además, probablemente desaparecerá ese espacio dedicado a punto de información y conversaciones. Para salmantinos y forasteros. Será ocupado por la terraza del establecimiento hostelero que ocupa el terreno colindante.

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  12. Félix..la calle la Rua ya no será igual, los que hemos pasado tantos años en ella hemos conocido muchos pequeños comercios y que penita como se están perdiendo

    Félix siempre estabas ahí dispuesto con tu sonrisa tu amabilidad
    Y tú gran corazón , que buenas tertulias hemos tenido, que momentos nos quedan para el recuerdo y la gente que hemos conocido
    Félix nos veremos paseando por la Rua … la calle más bonita de Salamanca
    M Carmen Longplay

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