El principal acusado del asesinato de ‘El Chispi’, Cristóbal M.S. ‘El Vinas’ ha asegurado durante el juicio que comenzó este lunes en la Audiencia de Salamanca, que no tiene nada que ver ni estuvo en el lugar del crimen, porque estaba en su casa.
Texto: J.G.H.
Acusó del crimen a su hijo, ‘El Pepón’ (que se suicidó cuando estaba en prisión tras ser detenido por este caso), y a ‘El Rafi’. Sin embargo, tanto este último como ‘La Samira’ (la viuda de El Pepón), aseguran que los culpables fueron ‘El Pepón’ y ‘El Vinas’ (padre e hijo), añadiendo que ‘El Pepón’ llegó a casa manchado de sangre y le confesó el crimen.
Cristóbal S.M., principal acusado de la muerte de ‘El Chispi’, ha negado durante su declaración de este lunes en la Audiencia Provincial ser el autor del crimen, así como el haber estado en el lugar del asesinato. De esta manera, ha señalado que en aquel momento estaba en su domicilio, culpando de la muerte de ‘El Chispi’ a ‘El Pepón’ -su hijo- y al ‘Rafi’.
‘El Vinas’ ha señalado que tras el asesinato “se revolucionó todo el barrio” y “vinieron todos los gitanos, los cachitos (familia de ‘El Chispi’)”. Si bien, iban a buscar a ‘El Pepón’ y ‘El Rafi’, no a él, ya que “no había hecho nada”. También asegura que no huyó y permaneció en el barrio de San José hasta su detención, sin sufrir “amenazas ni nada” por el mismo motivo.
Por otro lado, en cuanto a las armas que se hallaron en un trastero de su propiedad, ‘El Vinas’ ha puntualizado que en ese lugar “entran muchos gitanos” y que su mujer –‘La Rocío’- “tiene síndrome de Diógenes” y “lo guarda todo”, lo que también hace referencia a fotos de ambos encontradas en el lugar.
A su vez, ‘La Rocío’ también ha indicado que en ese trastero “entran muchos gitanos” y ha negado conocer alguna de las armas allí encontradas. La acusada ha apoyado la versión de su marido, repitiendo que el día del crimen estuvo “toda la mañana en casa” y que se enteraron del asesinato “por la televisión”.
Por contra, ‘El Rafi’ ha negado haber matado a ‘El Chispi’, inculpando, a su vez, a ‘El Pepón’ y ‘El Vinas’, al igual que ‘La Samira’. Esta última, además hace tal afirmación recalcando que fue el propio ‘Pepón’ -su pareja y además su primo- quien le había confesado que él y su padre (‘El Vinas’) eran los responsables. “Me dijo que habían sido él y su padre (‘El Pepón’ y ‘El Vinas’)”, ha revelado.
Asimismo, Estrella Ludivina G.M. ‘La Samira’, quien afirma que avisó a su pareja cuando vio al ‘Chispi’ en el centro de salud porque le “sorprendió” verle cuando “pensaba que estaba desterrado”, ha expuesto que antes del asesinato, cuando llegó a casa, vio que ‘El Pepón’ “se estaba preparando” y en la calle estaban ‘El Vinas’ y ‘La Rocío’ esperándole. Posteriormente, a las 14:00 horas aproximadamente, ‘El Pepón’ regresó a casa “manchado de sangre” y “me dijo: ‘ya está, lo he matado’”.
‘El Rafi’, ha asegurado que ambos dispararon “varias veces” contra ‘El Chispi’, comenzando los disparos el primero, mientras que el segundo lo “remató”. Si bien, en tan solo unos minutos, ‘El Rafi’ ha cambiado su versión de los hechos, pasando de afirmar inicialmente que llegó al lugar del crimen cuando ‘El Chispi’ estaba en el suelo, hasta reconocer después que su llegada se produjo “uno o dos minutos antes” de que lo mataran. “Pasé en el momento inapropiado por el lugar inapropiado”, ha asegurado.
También ha indicado que previamente ‘El Chispi’ y ‘El Pepón’ habían tenido una disputa y él había logrado frenarla, por lo que se detuvo para pararlos de nuevo. Después del asesinato, expone, ‘El Pepón’ se subió en el coche de ‘El Rafi’ y le dijo “tira”, para que le llevara hasta su casa. “Cualquiera decía que no”, ha confesado ‘El Rafi’. Además, ha confesado que conduce, aunque no tiene carné, matizando que lo hace “rápido”.
Después, explica que “llegaron familiares” diciendo que “los cachitos” -la familia de ‘El Chispi’- creían que ‘El Rafi’ era el responsable y querían matarle, a él y a su familia. Por este motivo huyó a Tudela de Duero (Valladolid) junto a su mujer -Susana S.G.-, ‘El Pepón’, ‘La Samira’ y los hijos de esta.
Ya en prisión, la familia de ‘El Pepón’ -conocidos como los Vinas- le ofreció hacerse cargo de su mujer y su hijo, asegurándole que a él no le faltaría nada en la cárcel si reconocía ser el culpable. “Querían hacerme el lío”, expone, aclarando que por este mismo motivo cambió de abogado -que hasta ese momento era el mismo que el de ‘El Vinas’ y ‘El Pepón’-. Por ello, como no aceptó, estos últimos trataron de asesinarlo en la cárcel.
Susana S.G., se ha pronunciado en la misma línea que su marido ‘El Rafi’. Si bien, ella ha asegurado no haber visto el tiroteo porque los cristales del coche, del que no se bajó, estaban “tintados”. Cuando ya estaban en Tudela de Duero, explica que declaró ante la Policía y el Juzgado porque ella y su marido estaban “hartos de la situación”, así como de que ‘El Pepón’ y ‘El Vinas’ no admitiesen su culpa. También ha señalado que colaboró “en todo momento” con la Policía y que ella y su marido se entregaron cuando vieron que tenían “seguridad” de que los familiares de ‘El Chispi’ no iban a hacerlos nada.