Hoy en día es raro ver a niños y niñas jugar en las calles de las ciudades, no tanto en los pueblos, pero allí no hay niños. Quizá por ello, desde hace 12 años se celebra el Día de la Educación Física en la Calle, que se celebra cada 26 de abril. Nació con el fin de exponer a la sociedad los beneficios de la asignatura, dándole visibilidad en espacios públicos, y mostrando qué es la Educación Física, una Educación Física actual para todas y todos.
Los escolares de Las Siervas de San José se han apoderado este miércoles de la plaza de San Román, han sacado el potro, las colchonetas, aros, combas,… y bajo la supervisión y orientación de los profesores de Educación Física, realizaron los ejercicios al aire libre y para disfrute de los caminantes que volvieron a ver a niños y niñas jugar en la calle.
Los alumnos están encantados con salir a hacer ejercicio a la calle. Para Sofía es un momento de diversión. Lo mismo opina Sergio, “está muy guay. Sales al aire libre, tienes distintos juegos y hay mucho espacio”.
A Valeria realizar la clase de Educación Física en la plaza de San Román le recuerda a su pueblo, Paradinas de San Juan, cuando está jugando con todos sus amigos. “Me gusta mucho el deporte, me encanta hacerlo en la calle y que nos vean como jugamos”.
Vega también juega en la calle cuando va a su pueblo, Villar de Gallimazo, le gustaría bajar a jugar a la calle, pero señala que ya no es “como antes, porque tenemos menos tiempo, porque cada vez tenemos más actividades”.
A Carlota le parece divertido que la Educación Física haya salido del gimnasio a la Plaza de San Román, porque así están un rato fuera del colegio y “desconectamos un poco”. Carlota no tiene la oportunidad de jugar en la calle. En cambio, Íker sí que lo hace porque vive en Salas Bajas. Para él, realizar la clase en la céntrica plaza es “genial estar en la calle. Nos da el fresquito”.
En esta clase de Educación Física, Ainhoa y Ainara son compañeras de juegos. Opinan que es muy divertido, porque hay más juegos, actividades y están más libres. No suelen jugar en la calle, pero ambas están de acuerdo en que les encantaría. “Sería muy divertido jugar en la calle, porque encontrarías a otros niños y niñas con los que hablar. Además, haces ejercicio. Es una forma de relacionarse con más personas”, apuntan casi al alimón Ainhoa y Ainara y terminan diciendo que en hay que tener cuidado en la calle.
Por último, Victoria y Ainara valoran el espacio tan abierto que le ofrece la plaza de San Román frente al gimnasio o el patio del colegio. “Podemos hacer más cosas, no estamos siempre en el mismo entorno”.
Sobre la posibilidad de jugar en la calle, ellas, al igual que otros compañeros creen que sería bueno, porque conocerían y se relacionarían con otros niños y niñas que no van a su colegio. Tanto Victoria como Ainara no pueden salir a jugar a la calle, ambas juegan en las terrazas de sus casas.
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https://youtu.be/DjTa4B7i6kc
