Iberdrola alcanzó un beneficio neto de 1.485,4 millones de euros en el primer trimestre de 2023, lo que supuso un incremento del 40,4 por ciento con respecto a los 1.058,3 millones obtenidos en idéntico periodo de 2022.
Según informó la compañía a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), la Cifra de Ventas se elevó hasta los 15.460,6 millones, un 27,2 por ciento por encima de un año antes. Por su parte, el beneficio Bruto de Explotación (Ebitda) fue de 4.064,5 millones, un 37,7 por ciento por encima del registrado en marzo de 2022.
La compañía realizó unas inversiones de 10.400 millones de euros en el primer trimestre de 2023, lo que supuso un nueve por ciento más que en el mismo periodo del año anterior. El 91 por ciento de la inversión se ha destinado a renovables (4.600 millones de euros, de los que un 30 por ciento correspondió a eólica marina) y a redes inteligentes (4.800 millones) para acelerar la electrificación y fomentar la autonomía energética.
Según el presidente de Iberdrola, Ignacio Sánchez Galán, “las inversiones por 10.400 millones de euros y la normalización de las condiciones operativas nos han permitido impulsar el crecimiento y seguir aportando valor a las sociedades de todos los países en los que prestamos servicio”.
Este trimestre estuvo marcado por nuevas alianzas y rotación de activos para impulsar la electrificación con energías limpias.
En las últimas semanas, la compañía cerró un acuerdo para vender el 60 por ciento del negocio de México por 6.000 millones de dólares (unos 5.500 millones de euros aproximadamente).
A esta operación se unen también el nuevo vehículo con el fondo soberano de Singapur (GIC) para coinvertir en el negocio de redes de transporte en Brasil anunciado este miércoles y el acuerdo con Norges para nuevos proyectos renovables con una capacidad de 1.300 MW.
De hecho, gracias a los últimos dos acuerdos cerrados en este trimestre, la compañía ha alcanzado en tres meses el objetivo financiero de 7.500 millones de euros fijado en el Plan de las alianzas estratégicas y a la rotación de activos para 2025.
El flujo de caja operativo de la compañía alcanza los 3.000 millones de euros en los últimos tres meses, mejorando la ratio de generación de caja sobre la deuda neta en 1,3 puntos porcentuales, hasta el 25,3 por ciento.
En el conjunto del ejercicio 2023, Iberdrola prevé un crecimiento del beneficio neto entre el cinco y el diez por ciento, sin considerar extraordinarios adicionales.