La base aérea de Matacán sirvió este miércoles de escenario para la recreación del simulacro ‘Vega 23’, de obligado cumplimiento, al menos, con periodicidad bianual, en el que se simuló un grave accidente aéreo con una decena de fallecidos y 23 heridos de diversa consideración, según los datos proporcionados a Ical por fuentes militares.
J.M.A. / Ical.- La actividad contó con la participación de un total de 173 efectivos de emergencias, con el objetivo de ensayar un despliegue de medios civiles y militares idéntico al que se pondría en marcha en el hipotético caso de que un avión con 40 personas se partiera en dos nada más tomar tierra.
Los figurantes, un total de 57, entre los que había 29 personas de la propia base aérea de Matacán, personal militar en formación, y 28 más de la Escuela de Adventia interpretaron a los cinco miembros de la tripulación del avión siniestrado y los 35 pasajeros, además de una docena amigos y familiares de los pasajeros y cinco personas realizando papeles de apoyo. El resultado del accidente fingido fue de diez fallecidos, nueve heridos muy graves, ocho graves, seis leves y siete personas ilesas.
El operativo desplegado, que contó con un total de 173 efectivos, sumó una decena de vehículos contraincendios, cinco ambulancias, tres vehículos de apoyo sanitario y 17 vehículos de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad.
Entre las instituciones participantes, además del Ejército del Aire, la Delegación Territorial de la Junta de Castilla y León en Salamanca, con Protección Civil y el Centro de Emergencias 112, así como la Subdelegación del Gobierno en Salamanca, con Protección Civil, Guardia Civil y Policía Nacional, Aena, Bomberos de la Diputación, miembros del Instituto de Medicina Legal y Ciencias Forenses y servicio de recogida Judicial de cadáveres del Juzgado de Guardia y Cruz Roja.
A las 9.10 horas se produjo la supuesta declaración de emergencia por una aeronave civil que estaba completando la aproximación para aterrizar en la base aérea de Matacán, a través de la Torre de Control y tras el aterrizaje, sufrió un accidente durante la maniobra.
Los equipos de extinción de incendios del aeropuerto salieron hacia la zona del siniestro a la vez que las ambulancias establecidas en la propia base. La Torre de Control completó de inmediato la activación del plan de emergencia avisando al mando de la infraestructura militar.
Apenas cinco minutos más tarde, hacia las 9.15 horas, llegaron al área de salvamento los vehículos del servicio contra incendios de Matacán y se constituyó un Puesto de Mando Avanzado en la zona.
Al mismo tiempo llegaron las primeras ambulancias de Matacán mientras el jefe del PMA advirtió a la Torre de Control de que la gravedad del accidente requería dar aviso a los servicios de sanidad y contra incendios externos a la Base Aérea y Aeropuerto de Matacán.
El jefe de día llamó entonces al Servicio de Emergencias 112 de Castilla y León, dejando constancia de que se trataba de un simulacro. “Comunicamos que ha ocurrido un accidente aéreo en la base aérea de Matacán. Los medios de emergencia y rescate de la unidad son insuficientes y por ello solicitamos la ayuda de medios contraincendios, sanitarios y de cuerpos y fuerzas de seguridad del exterior”.
Personal de la Policía Aérea llegó entonces a la zona del siniestro para controlar los accesos y balizar las áreas de salvamento y socorro, así como la zona de evacuación, y para establecer así las rutas más seguras.
A las 9.25 horas se sucedieron las llamadas a la Subdelegación del Gobierno, la Delegación Territorial de la Junta, el delegado de Aena en el Aeropuerto de Salamanca, a la compañía aérea operadora del avión siniestrado y a los mandos orgánicos del Ejército del Aire y del Espacio.
El personal de la Guardia Civil tomó control del acceso de la carretera general a la base y del Aeropuerto, facilitando la llegada de colaboración exterior. Mientras, se constituyó el centro de coordinación operativa. Aena, por su parte, activó las distintas salas de atención al público y familiares, en la termina civil, donde se reunieron además los ilesos y se produjo el reencuentro tras lo ocurrido. Las autoridades recibieron la lista de pasajeros del avión siniestrado.
Hacia las 9.45 horas, llegaron las ambulancias de Cruz Roja y de los Servicios Contraincendios de la Diputación de Salamanca a la zona del accidente. Comenzó así el traslado de los primeros ilesos a la terminal del aeropuerto de Matacán y se produjo la notificación de la existencia de fallecidos en el siniestro.
A las 10 horas, la Guardia Civil instruyó las pertinentes diligencias al existir cadáveres, llamaron al juez de Guardia y a Medicina Forense. La evacuación de heridos se prolongó hasta las 11 horas, momento en que se procedió levantamiento de cadáveres. Pasado el mediodía, comenzó el proceso de recuperación de restos de la aeronave y se reanudaron las operaciones en la base aérea.
