“Paz social” y “estabilidad” entre trabajadores y empresas para los próximos tres años. Los secretarios de CCOO y UGT en Castilla y León, Vicente Andrés y Faustino Temprano, y el presidente de CEOECyL, Santiago Aparicio, suscribieron en la sede del CES el documento que sienta las bases para la negociación colectiva en la Comunidad, subiendo salarios, generando derechos y mejorando la competitividad empresarial.
ICAL. Sindicatos y empresarios rubricaron la transposición y adaptación del V Acuerdo para el Empleo y la Negociación Colectiva en Castilla y León, que servirá de guía para la negociación que acometan sus estructuras durante los próximos meses, con mejoras salariales previstas del cuatro por ciento en 2023, y del tres por ciento en 2024 y 2025. Un fallo en la redacción del documento que se iba a firmar obligó a retrasar el acto unos minutos. “Se corrigió un párrafo que se coló en la redacción sin haberlo advertido”, comentó Andrés.
Vicente Andrés y Faustino Temprano coincidieron en su objetivo de mejorar en la Comunidad, las horquillas salariales para los sectores más precarios de la Comunidad, en el sector servicios, que han sufrido una mayor pérdida de poder adquisitivo y subidas salariales ínfimas los últimos años, con retribuciones muy por debajo de la media.
Andrés indicó que en Castilla y León se perdió un 8,3 por ciento de capacidad de compra entre 2021 y 2022, y los costes salariales están 3.000 euros por debajo de la media, y apuntó a que los servicios, y sobre todo el turismo y la hostelería están teniendo “importantes beneficios, se están saliendo del mapa”, por lo que “hay que ir mucho más allá del cuatro por ciento”. Temprano defendió que es fundamental el alza salarial sobre todo para los sectores menos protegidos de servicios y para las mujeres. Recordó al respecto que al cierre del año pasado las subidas salariales estaban por debajo de la media, cuando la inflación de España se superaba en un punto.
Tanto los dirigentes sindicales como el líder empresarial coincidieron en definir el acuerdo como “bueno” para todas las partes frente a la conflictividad, aunque Aparicio quiso dejar claro que se trata de recomendaciones y se respeta la “autonomía” de las partes, que “harán lo que crean conveniente”, conforme a su situación. Temprano apostilló al respecto que “sino se cumple en las mesas de negociación que están abiertas en las distintas estructuras provinciales o sectorial, no habremos conseguido nada”.
El presidente de CEOE entendió que la firma del acuerdo, en Madrid el pasado 10 de mayo, y hoy en la Comunidad, es “muy importante” en un contexto de inestabilidad económica generada por la guerra de Ucrania. Un texto que definió como una “nueva apuesta por el diálogo social bipartito”, ya que “recupera las relaciones laborales y no da mucha confianza y seguridad”.
Santiago Aparicio ensalzó que mejora las condiciones y la calidad en el empleo, con un crecimiento de la productividad y la competitividad. Asimismo, defendió que “enriquece el contenido de la negociación colectiva, porque la adapta a los cambios de la sociedad” con materias como la digitalización y la sostenibilidad. “Aporta certeza y compromiso”, resumió.
Aparicio también comentó que “da una tranquilidad pasmosa a las parte”, porque incluye cláusulas de revisión salarial, si la inflación excede un punto lo firmado, lo que revela la “responsabilidad por parte de todos”. Agregó que se ha producido un “salto cualitativo importante” y felicitó que insta al Gobierno a modificar la ley de contrato públicos para que las empresas “no pierdan dinero”. “Es un buen acuerdo y llega en un momento oportuno porque trae estabilidad y paz social”, sentenció.
Vicente Andrés, por su parte, apuntó que el acuerdo adaptado incluye dos aspectos “esenciales” para Castilla y León como es recuperar el Diálogo Social tripartito” para “construir comunidad” y un “alegato” para que se recupere el Serla.
El dirigente sindical puso de releve que el acuerdo, “mejora de forma sustancial las relaciones laborales y desarrolla la reforma laboral y cierra un círculo”. “Entramos en un proceso de estabilidad en el mundo del trabajo a través de la negociación colectiva”, dijo, que gana en modernización y mejoras sociales.
Andrés explicó que la firma de este viernes adapta el AENC nacional a la Comunidad, donde la negociación colectiva afecta a 450.000 personas, con casi 200 convenios sectoriales y 530 de empresa. “Es muy importante porque marca las reglas de juego para los tres próximos años para la negociación colectiva”, dijo, para precisar que incluye 16 capítulos que hablan de todos los aspectos nuevos del mundo del trabajo, como igualada, acoso, sexual, flexibilidad, prevención de riegos, teletrabajo, desconexión digital y teletrabajo.
Faustino Temprano definió el acto de firma como “muy importante para Castilla y León” y apeló a su cumplimiento, para recordar a las empresas que no puedan asumir las mejoras salariales previstas a que utilicen la posibilidad del descuelgue.
Temprano aseguró que este acuerdo constituye un “colchón para hacer frente a la inflación” y genera confianza en las empresas, en la sociedad y en los poderes públicos. El líder de UGT recordó que el 98 por ciento del tejido empresarial de la Comunidad, está integrado por pequeñas empresas y autónomos, y aseguró que el acuerdo “no va en contra de ellos”, porque los salarios “no son el problema, sino la competitividad”.
“Con este acuerdo, la conflictividad tiene que bajar en Castilla y León, y todos tenemos que ser capaces de darle cumplimiento”, concluyó.