La fiesta se puede acabar por muchos motivos, puede ser por propia iniciativa o por la intervención de la Policía Local.
Justo al comienzo de la este sábado, a las 00.03 horas, una denuncia por ruido en Íscar Peyra acabo con la fiesta que había montada allí, al intervenir los agentes de la Policía Local.
Además, para dos personas la noche del sábado concluyó de manera abrupta al ser denunciados por tenencia de sustancias estupefacientes.
La primera de ellas se llevó a cabo en el interior de un establecimiento en la Cuesta de Sancti Spíritus a la 1.10 horas. La segunda denuncia se produjo durante un control de alcoholemia a un vehículo en el Paseo de Canalejas a la 1.29 horas.