El 37,7 por ciento de los votantes citados este domingo con las urnas en Salamanca habían ejercido su derecho al voto hasta las 14 horas, según informó el Ministerio, un 0,29 por ciento más que en las elecciones municipales de 2019, según los datos facilitados pro el Ministerio del Interior.
Se trata de una de las menores subidas de Castilla y León, donde la participación media es de 0,98 puntos más que hace cuatro años (37,95%).
Salamanca capital afronta la jornada con la expectativa de si los electores barren del mapa a Cs y en su lugar entra Vox para mantener al PP en el gobierno municipal durante otros cuatro años, y ya serían 32 consecutivos desde 1995.
Por la izquierda la novedad es la unión de Podemos, IU y Alianza Verde en una sola lista para aglutinar ese votos que habitualmente perdía al ir por separado, lo cual podría aumentar sus expectativas de representación, que ahora está en dos concejales. Su cabeza de lista, Carmen Díez, ya ha anunciado que darían su voto al candidato socialista si fuera necesario para formar gobierno.
La gran novedad de este año es, sin embargo, la atomización que ha sufrido el mapa electoral, con 14 candidaturas, el doble que en 2919, y casi todas ellas en el espectro de la derecha, por lo que es una incógnita cuál será su nivel de apoyo.
De entrada, una participación menor en las elecciones favorece los intereses de los grandes partidos y, especialmente, el que está en el poder.
A las seis de la tarde se comunicará el dato de participación registrada hasta esa hora, y los colegios cerrarán a las 20 horas, excepto el de Candelario, que lo hará 45 minutos después para compensar el retraso sufrido en su apertura.
2 comentarios en «Salamanca vota»
algo hay que hacer no podemos seguir asi
Un candidato y una campaña mejores. No puede ser que yo, que no he votado a la derecha en mi vida, esté inundado de publicidad del PP o Cs, y del PSOE no vea nada en mis RRSS. Lo que no se puede es que llevando 28 años en el poder el PP tu mensaje sea «tampoco vamos a revolucionar el Ayto». El PSOE cambió en Madrid, pero en provincias… el mismo rollo y el mismo nepotismo.