La creación de la Zona de Bajas Emisiones (ZBE) en Salamanca, que abarca la primera ronda (Canalejas, Avenida Mirat, San Vicente), limitará el tráfico de vehículos particulares en su interior. Para controlar el acceso a esa zona a partir del 1 de enero de 2024 y el tráfico en el resto de la ciudad el Ayuntamiento ha instalado unas 200 cámaras que se suman al centenar que ya existían.
Son casi 300 cámaras en más de cien puntos de control que en teoría están pensadas para registrar las matrículas y algunas tienen un giro de 360 grados. Graban matrículas y todo lo que pasa ante ellas, sin discriminar a los ciudadanos, que también serán grabados, aunque la revisión de las grabaciones tiene que realizarse bajo tutela judicial.
Se controlará el acceso a la zona de bajas emisiones y el acceso a la zona peatonal (la almendra central de la ciudad), así como el acceso a los parkings disuasorios de la periferia, por seguridad, y los parkings subterráneos del centro, para evitar la picaresca de justificar el acceso en coche diciendo que vas a aparcar en un parking, y luego no lo hagas o, si estuviera lleno, te quedaras por la zona.
Se han instalado las cámaras azules en la zona de bajas emisiones y otras en los puntos de control de tráfico por toda la ciudad, con dobles cámaras (una fija y otra con giro de 360º) en numerosas rotondas.
Esto sobre el papel. Otra cosa es que no ocurra algo similar a lo que ha pasado con las que en su día se instalaron en la zona monumental, que se han ido estropeando y, por falta de mantenimiento, no se han repuesto. Incluso algunas se han descolgado ya.
Las ZBE buscan permitir el tránsito por ciertas áreas solo a medios de transporte motorizados con etiquetas de distintivo ambiental 0 emisiones, ECO y C, referentes a su eficiencia en el uso del combustible y al menor impacto medioambiental de su funcionamiento. Sin embargo, estas etiquetas tienen en cuenta solo gases que afectan de forma directa a la salud, pero no a los gases causantes del efecto invernadero y, por tanto, del cambio climático.
Un sistema de cámaras que en adelante puede servir, además, para que un software de reconocimiento pueda ser utilizado para labores de seguridad policial, detectando al instante a una persona introduciéndole sus características físicas y complementos, y detectando, asimismo, vehículos facilitando casi al instante su recorrido por la ciudad y su ubicación en vivo.
Esto puede agilizar, por ejemplo, la detención de un delincuente a la fuga si se conocen algunas características físicas y de indumentaria. Se le comunican a la central, se meten en el programa y lo detecta en las grabaciones del día, muestra su recorrido y señala su ubicación actual, de modo que se le puede facilitar la dirección a un coche patrulla para que vaya en su busca.
Algo parecido se puso en práctica ya las pasadas ferias y Fiestas en la Plaza Mayor, donde se probó ese software con éxito. Su implantación en el futuro depende, sobre todo, de la voluntad del equipo de gobierno municipal.
Este sistema ofrece muchas dudas sobre el respeto a la privacidad de ciudadanos y empresas, porque estaríamos bajo la vigilancia de una suerte de Gran Hermano, que si no cae en buenas manos puede arrebatar el anonimato a los salmantinos de bien. No por parte de los agentes, sino de terceros.
La expectación generada por la cantidad de nuevas cámaras instaladas en el casco histórico de la ciudad ha sido el principal motivo por el cual el partido Por Salamanca, a través de su representante, Chenche Martín Galeano, exige que se retiren «inmediatamente». “Nuestros ciudadanos no se merecen estar controlados las 24 horas y menos para ser sancionados por cualquier descuido cometido”, afirma.
Como indica Chenche, “nos lo han vendido como un sistema para mejorar la seguridad de la ciudad, pero es mentira, hace tres semanas recibíamos la noticia de una amiga fisioterapeuta a la que le habían robado su furgoneta en Pizarrales,… nos preguntamos por qué no hay cámaras en Pizarrales y sí todas están en el centro”.
Sobre la vigilancia del Patrimonio Arquitectónico asegura que “volvemos a denunciar la Salamanca a dos velocidades. Por un lado se está esculpiendo un nuevo medallón en la plaza y por otro se está dañando el patrimonio arquitectónico al no tener agentes que se preocupen de concienciar a los conductores de este tipo de vehículos. Eso sí, nos hemos encontrado patrullas de la Policía Local, una pareja de agentes situados dentro del vehículo, ambos con su teléfono móvil en la mano, y el radar móvil situado delante del vehículo. ¿No sería más correcto advertir y concienciar al conductor que no esté cumpliendo la norma? Vemos que prevalece la sanción por encima de la prevención. No olvidemos que el Ayuntamiento es el responsable de cualquier acción llevada a cabo por la Policía y por lo tanto si la Policía sanciona y recauda, lo está haciendo el mismo Ayuntamiento», concluye.
1 comentario en «El Ayuntamiento te vigila»
Gastar, gastar y gastar eso es lo unico que saben hacer. Esa es su manera de entender el gobierno. Y todo porque no tienen ninguna responsabilidad. Menos granito y cemento y mas arboles y fuentes. Y no esos tiestos o parterres propios de las casitas de muñecas que estan poniendo por doquier. En poco tiempo veremos que es de ellos