[dropcap]L[/dropcap]a Biblioteca abrió sus puertas el 8 de septiembre de 1981 ofreciendo 30 puestos de lectura. En 1982 se puso en marcha la Hemeroteca y Fonoteca con ocho espacios para la audición. En verano se instalaron puntos de lectura en La Alamedilla, el Taller de Pizarrales y dos más en La Vega y Tejares.
La Casa Municipal de Cultura organizó la Semana de Cine, las Jornadas de Urbanismo, la Semana de Béjar en Salamanca, representaciones teatrales, conciertos, recitales y la fiesta de animación infantil. Colaboraba en los Cursos de Verano de la Universidad y con el “Verano Cultural”. En resumen, fue el motor de la animación cultural de Salamanca.
La Sala Municipal de Exposiciones se abrió en Rúa Mayor con una muestra de planos y fotografías sobre la actividad del Ayuntamiento en política de patrimonio.
En el curso 81-82 celebró una veintena de exposiciones individuales, colectivas y antológicas, sobre todo de pintura, fotografía y grabados. En 1982 se pudo ver una muestra de fotografías seleccionadas para participar en una exposición colectiva, “Nuestra ciudad Salamanca”, organizada por ciudadanos de Würzburg.
En septiembre de 1982 se abrió el Auditorio Municipal de Música en la iglesia de San Blas. Pero Salamanca dio un salto exponencial en su opción por la cultura con la inauguración de la Casa de Cultura y Museo de Arte Contemporáneo en la Casa Lis, que con este largo y pomposo nombre abrimos la restaurada casa modernista.
En las ferias y fiestas de 1982 se inauguró la nueva Casa de Cultura del barrio de La Vega, instalada en las aulas de las que fueron escuelas. Funcionó también como centro cívico. La idea del Consistorio era la de descentralizar las actividades culturales.
Esta casa de cultura fue, junto con las de San José y Garrido, las primeras en funcionar, y sirvieron de modelo para otros barrios. Era entonces concejal de La Vega un hombre del barrio, íntegro, socialista hasta la médula, trabajador incansable, ejemplo a seguir en estos tiempos de zozobra, Luis Calvo Rengel, que trabajó intensamente para conseguir todas las mejoras que le demandaban.
Después abrimos Tejares, y a finales de 1982 comenzó a funcionar la Casa de Cultura del barrio Vidal, en el local que anteriormente utilizaba para sus reuniones la Asociación de Cabezas de Familia. Se realizó una reforma interior que costó un millón de pesetas.
Todas sus instalaciones eran muy sencillas y humildes, una sala de lectura, otra de reuniones, un despacho y un almacén. Se inauguró con una exposición fotográfica, “Salamanca Inédita”, la exhibición de dos películas, una para adultos y otra infantil, y con sesiones de animación a la lectura. Colaboraron en la programación de sus actividades la Asociación de Vecinos de Vidal y la Casa Municipal de Cultura.
Inmediatamente después de concluir la obra de restauración, en octubre de 1981, se comenzó a amueblar el Auditorio Municipal de Música en la iglesia de San Blas, para ello se instalaron 300 butacas. Los artistas salmantinos se asociaron en ASA, y con ellos nació la Casa del Artista con un objetivo claro, crear una Escuela Municipal de Arte. Leopoldo Matos fue su primer secretario y uno de sus promotores.
Cedimos a ASA la antigua vaquería de la Huerta de los Jesuitas. Entregamos sus instalaciones en bruto, y ellos la remodelaron a su gusto. Crearon talleres de grabado, pintura, escultura, urbanismo, cerámica y una sala de exposiciones. Intervinieron en la constitución de la Asociación de Estudiantes de Arte y Jóvenes Artistas. Pretendieron rehabilitar una vivienda para cederla temporalmente a artistas en tránsito por la ciudad.
