El conductor ‘kamikaze’ fallecido tenía dos artefactos incendiarios en su casa

El fallecido vivía en la calle del Bierzo.

El conductor fallecido este viernes en un accidente de tráfico en la A-62, que responde a las iniciales de I.F.F., 46 años, pudo provocar el accidente en el que perdió la vida. Previamente intentó suicidarse en su casa y en su garaje, donde la Guardia Civil encontró sendos artefactos incendiarios o explosivos.

 

Al parecer, circulaba en dirección contraria por la autovía cuando colisionó contra un camión de matrícula portuguesa cuyo conductor resultó ileso en el accidente.

Según manifestación del conductor del camión, vio como un vehículo turismo se acercaba en sentido contrario, por lo que realizó una maniobra evasiva hacia el carril izquierdo, maniobra que también hizo el vehículo, impactando frontalmente.

Ante los hechos, por parte de la Guardia Civil se procede de inmediato a iniciar la investigación del suceso y reconstrucción del mismo, así como de los momentos anteriores al accidente, por lo que el equipo investigador se desplazó al domicilio del fallecido, en la calle Bierzo nº 19-21.

Al llegar a la vivienda y debido a que los vecinos habían detectado un fuerte olor a gas, se encuentran con que la propietaria de la misma, ha accedido a su interior con ayuda de un cerrajero. Acompañándola, observan en el salón un temporizador -ya inactivo- y, en el dormitorio, una bombona de butano de la que sale un tubo que, a través de un orificio, penetra en el salón. En el interior del dormitorio persistía un fuerte olor a gas.

Los agentes abrieron de inmediato las ventanas para disipar el gas y evitar el riesgo, al tiempo que se avisaron a los bomberos de Salamanca.

Otra bomba en el garaje

Ya en colaboración con bomberos bajaron al parking para inspeccionar la plaza de garaje empleada por el fallecido, que tenía la puerta cerrada pero abombada hacia su exterior. Al acceder los bomberos a su interior se encuentran otro temporizador, también inactivo, junto a una bombona y los restos de dos pequeños incendios sofocados, según informa la Guardia Civil de Salamanca.

De las primeras gestiones realizadas en el lugar por los componentes del equipo de investigación, se deduce que el fallecido no tenía trato con los vecinos y vivía solo.

Para asegurar totalmente la inexistencia de riesgos y determinar si era un dispositivo eficaz para causar un incendio o explosión, se recaba la presencia del equipo GEDEX de desactivación de explosivos de la Comandancia de Valladolid. Personados en el domicilio del fallecido a las 12:47 horas confirmando la inexistencia de riesgos para los ocupantes del inmueble y edificios colindantes.

GEDEX confeccionará un informe técnico sobre los artefactos incendiarios que se trasladará al Juzgado de Guardia.

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