La Seguridad Social ha anunciado cambios en la edad legal de jubilación, así como en el tiempo mínimo de cotización de cara a 2024, algo que afectará a miles de contribuyentes. Además, para aquellos que no hayan cotizado lo suficiente, el sistema público también dispone de las llamadas pensiones no contributivas, de una cuantía bastante inferior.
Todos los trabajadores, llegado el momento de su jubilación, tienen derecho a una pensión contributiva. Sin embargo, para poder recibirla, deben haber cotizado un determinado tiempo, tal y como establece la Seguridad Social. Por su parte, para los que no hayan trabajado lo suficiente, hay otras alternativas.
Como se viene produciendo desde 2013, cada año aumenta en España tanto la edad legal de jubilación como el periodo mínimo de cotización. Este año 2023, la edad ordinaria para quienes hayan cotizado 37 años y 9 meses es de 65 años, mientras que quienes no lleguen, deberán esperar hasta cumplir 66 años y 4 meses.
A partir del 1 de enero de 2024, la edad ordinaria se mantiene en los 65 años. Sin embargo, el periodo de cotización aumenta hasta los 38 años. Asimismo, la edad legal para quienes no cumplan con este requisito también sufrirá un incremento, en este caso hasta los 66 años y 6 meses.
Por otro lado, el periodo de cotización mínimo que establece la Seguridad Social para que un contribuyente pueda jubilarse obteniendo una pensión de carácter contributivo es de 15 años. No obstante, estos trabajadores solamente podrán contabilizar el 50% de su base reguladora para calcular la cuantía a percibir. También se establece que al menos dos de los años cotizados estén dentro de los 15 anteriores al momento de la solicitud.
Finalmente, para los que no puedan cobrar una pensión contributiva, está la opción de las pensiones no contributivas del Imserso. Si bien, este organismo exige unos requisitos a los solicitantes. Por un lado, los trabajadores no deben haber cotizado más de 15 años, deben tener cumplidos los 65 años y haber residido de forma real y efectiva en España durante al menos 10 años (dos de los cuales inmediatamente anteriores y consecutivos a la solicitud).
El otro requisito importante que debe cumplirse para recibir una pensión no contributiva (484,61€ al mes en 2023) pasa por no superar unos ingresos anuales. Esta cantidad se fija cada año en los Presupuestos Generales del Estado, por lo que, hasta que no se aprueben los de 2024, no se conoce el límite para ese año. Este año, el límite está en 6.784,54€ al año.