Olé, olé y olé en Calzada de Valdunciel. El encierro vespertino de este sábado, programado dentro de las actividades festivas en honor de Santa Elena, patrona del municipio, congregó a la afición taurina para ver cómo sus los más atrevidos le sacaban lances, pases de pecho y capotazos a los astados.
Además de ponerse delante de las vaquillas y el novillo para que subiera la adrenalina de los que pisaban la arena y los que los veían desde la barrera o el graderío.
Tarde de fiesta, donde hubo risas, buen humor y mucho cachondeo entre el respetable. Se notaba el ambiente festivo y el cansancio de varios días seguidos de fiesta.