El Ayuntamiento de Salamanca ha rendido homenaje este jueves sus nuevos centenarios. Nueve vecinos de la ciudad (7 mujeres y 2 hombres) han acudido al salón de recepciones junto a sus familias para recibir un obsequio tras convertirse en centenarios. Los protagonistas de este encuentro son: Matilde Sánchez, Celestino Revilla, Juliana Delgado, Gabriela Sánchez, Isabel González, Emilia Haro, Jesús Rodríguez, Carolina Martín y Ángela Teresa Romero.
Texto y fotos: Zuriñe Murillo
Los centenarios se dedicaban a oficios de diversa índole: en el caso de Jesús Rodríguez, al que le quedan incluso unos meses para cumplir 101 años, se ha dedicado más de setenta años al mundo de la zapatería aquí en Salamanca. Otros, por su parte, han sido empleados en bancos, en fábricas, cosiendo o se ocupaban de las labores del campo.
A continuación, Emilia Haro ha visitado multitud de ciudades gracias a que su padre era carabinero de costas. A ello se suma también el espíritu aventurero de Gabriela Sánchez, que recorrió gran parte de España con su Seat 127. Y Carolina Martín “que ha sido una mujer muy inteligente, previsora, hospitalaria, satisfecha de dar a sus hijos una vida mejor”, según el alcalde. Algunos descubrieron la pintura con avanzada edad, otros navegaron hasta con el buque insignia o se dedicaron al canto. ¡Qué barbaridad, cuántas cosas diferentes!, exclamaba el alcalde.
En cuanto a la procedencia, eran de puntos muy diferentes de España como Abusejo, Calvarrasa arriba, Santiago de la Puebla, Buenavista, Pedrosilla de los aires o Alba de Tormes. Además, había centenarios que vivían en lugares más lejanos: Amayuelas de Ojeda (Palencia) o el pueblo navarro de Eugi, pero al final todos acabaron echando raíces aquí en Salamanca y, por ello, han podido disfrutar del homenaje salmantino.
A lo largo de sus vidas, los asistentes han tenido hijos, nietos y biznietos. En total, 27 hijos, 38 nietos y 31 biznietos. Una gran familia que, algunos de ellos, han podido acompañar a sus centenarios para vivir un día inolvidable. Como muestra de reconocimiento de lo que significan para la ciudad, el Ayuntamiento ha obsequiado a los centenarios con un broche charro y una placa conmemorativa.
Finalmente, la concejala de Mayores ha hecho un llamamiento en modo de gratitud a las familias debido a que sin ellas no hubiera sido posible esta celebración. Una celebración que cada vez cuenta con más asistentes, pues antes constaban tres o cuatro, pero ahora son nueve los que han conseguido llegar a esa edad.
Entre las historias de los centenarios, la de Celestino Revilla, nacido en Amayuelas de Ojeda en la provincia de Palencia, trabajaba en un banco y le gustaba mucho pasar sus días allí. En su familia abunda el sexo femenino, pues tiene cuatro hijas, tres nietas y dos biznietas. En su día a día ve la tele, lee y en algunas ocasiones da un paseo. Antes le encantaba hacer senderismo por la montaña para respirar aire puro y disfrutar de las vistas. A pesar de que no pensaba llegar tan lejos, considera que el elixir de la vida se halla en una buena alimentación, hacer mucho deporte y, sobre todo, la montaña. Ese es el consejo que le da a los jóvenes: hacer mucho deporte y disfrutar de la montaña.
Emilia Haro, nacida en Eugi, dejó su pueblo navarro cuando tenía cuatro años y se fue “a un sitio maravilloso”: a Mallorca. De allí fue a Menorca, donde creció y aprendió el mallorquín. Después de que su padre se jubilara, se vino a Salamanca con unos 18 años y, como hablaba mallorquín, tuvo que estudiar el castellano. En cuanto a su familia, tiene tres hijos -que han presenciado el homenaje-, un total de ocho nietos y una nieta, además de cuatro biznietos; por tanto, las comidas familiares están llenas de diversión. Toda su vida se ha dedicado a la costura y ha comido mucha verdura, que, de hecho, es su comida favorita. En su día a día, sale de paseo con sus amigas, juega a la Tablet o usa el Facebook también como modo de entretenimiento (el avance tecnológico le parece “estupendo” aunque depende de las intenciones que tenga cada persona. “Las tecnologías cuanto más mejor”, confiesa.). Por otro lado, cree que su secreto para ser tan longeva ha sido la naturaleza y, por supuesto, vivir bien, hacer mucho deporte y tener una buena alimentación (que asegura que es “lo principal”). Por último, aconseja a los jóvenes que sean “honrados” y que cuiden su vida, evitando sustancias dañinas como son el alcohol y el tabaco.
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