Todas las alarmas saltaron este miércoles a las 20.15 horas cuando los vecinos detectaron un fuerte olor a gas en el número 13 de la avenida de Alfonso VI.
Con el recuerdo reciente del conductor kamikaze de Capuchinos en cuya vivienda y garaje se hallaron sendos artefactos incendiarios el viernes pasado, los bomberos desplazaron dos dotaciones al lugar donde ya estaba la Policía Local para tratar de averiguar el origen del gas y cerciorarse de que no estaban ante otro episodio similar.
Una vez revisadas las instalaciones del inmueble se pudo comprobar que se trataba de una falsa alarma y se recobró la calma en medio de una gran expectación vecinal.
