El Ayuntamiento de Salamanca abrirá al tráfico el próximo lunes, 17 de noviembre, el segundo tramo de la calle Pozo Amarillo, una vez que concluidas las obras de urbanización de esta vía y sus entornos. En los próximos días el Ayuntamiento de Salamanca realizará un tratamiento superficial en las aceras viejas.
La conclusión de estas obras ha supuesto un importante cambio en la zona, ya que en las calles y plaza en las que se ha actuado —Santa Eulalia, Deán Polo Benito y parte de Pozo Amarillo— serán a partir de ahora peatonales dando respuesta a una demanda de los comerciantes y atendiendo a lo recogido en el Plan de Movilidad Urbana Sostenible.
Tras concluir la actuación se ha ganado más espacio para los peatones y se ha mejorado la accesibilidad, respetando la entrada de residentes, a los hoteles, a los negocios, a la carga y descarga y al aparcamiento subterráneo.
Se han creado nuevos espacios, aceras más amplias y zonas de descanso para los peatones. Además se han plantado nuevos árboles y arbustivas y se han colocado bancos para el descanso de los ciudadanos.
Asimismo, se ha aprovechado el cierre de Pozo Amarillo para acondicionar el adoquinado de la calzada, que estaba deteriorado, desde la Plaza del Mercado hasta la calle San Pablo, en la intersección con San Justo.
Esta obra ha sido posible gracias a un presupuesto de 381.525 euros, lo que supone una reducción de casi 103.000 euros, un 27%, respecto al precio de licitación
Nueva regulación del tráfico
A partir del lunes el tráfico de vehículos en esta zona del centro de la ciudad recupera la normalidad. Se reabre la entrada a Pozo Amarillo a través de su acceso habitual, desde la calle Correhuela y su continuación hacia la plaza del Mercado (portales de San Antonio), la plaza del Poeta Iglesias y las calles San Pablo y Quintana.
El acceso al aparcamiento subterráneo de la plaza de Santa Eulalia ya venía efectuándose desde hace meses con normalidad a través de la calle del Aire, a la que se accede desde las calles Correhuela y Bermejeros. El primer tramo de la calle Pozo Amarillo, desde la plaza de Santa Eulalia hasta la calle Correhuela, queda configurado para el tránsito peatonal y el acceso de vehículos de residentes a garajes y hoteles de la zona, y se permitirá la carga y descarga en horario establecido.
Las paradas de los autobuses urbanos de las líneas 1, 3, 4, 8 y 9, que fueron trasladadas provisionalmente a la Gran Vía, recuperan su ubicación tradicional en la plaza del Mercado y la calle San Pablo, y lo mismo ocurre con la parada de taxis, que retorna a la calle San Teodoro. En cuanto a la calle San Justo, también recupera su sentido habitual de circulación, con entrada por la calle San Pablo – plaza del Peso y salida hacia la Gran Vía.