Isabel Pantoja ingresó este viernes en el centro penitenciario de Alcalá de Guadaira (Sevilla) para cumplir una condena de dos años por blanqueo de capitales.
La prisión de mujeres se encuentra a veinte kilómetros de la capital hispalense.
Isabel Pantoja accedió directamente al módulo de ingresos, como establece el protocolo, para cumplimentar los trámites obligatorios cada vez que llega un nuevo interno.
Sus hijos Kiko e Isabel acompañaron a la tonadillera en sus últimas horas antes de perder la libertad.