La trabajadora despedida por la empresa que gestiona los autobuses municipales ha consumado el despido, a pesar de que la sentencia del juzgado de lo social declaró el despido improcedente.
El fallo no anula el despido, y reconoce que no existen los motivos económicos que alegaba la empresa de los autobuses para echarla.
La sentencia le da la opción de readmitir o indemnizar a la trabajadora, y ha optado por darle el finiquito, aunque ella quería volver a la empresa.
El PSOE pidió este viernes en el pleno municipal al equipo de Gobierno que medie ante la empresa adjudicataria del servicio para readmita a la empleada, que ya tiene ingresada la liquidación en su cuenta (454 días por año hasta 2013 y 33 hasta 2014).
Un grupo de sindicalistas y simpatizantes de otros movimientos sociales volvieron a solicitar su readmisión este jueves durante la fiesta organizada en Pozo Amarillo para celebrar su peatonalización.