La Policía Nacional ha detenido a cuatro menores acusados de cometer un atraco a punta de pistola (de fogueo) en un kiosco de Capuchinos.
Los cuatro accedieron al establecimiento a las 18 horas de este lunes con la cara cubierta por un pasamontañas. Uno de ellos encañonó al propietario del negocio mientras los otros tres empujaron a la víctima detrás del mostrador exigiéndole que les entregara todo el dinero que tuviera.
Uno de lelos cogió una caja de caudales y se fueron corriendo hacia Pizarrales.
Dos de ellos, que ya estaban con otros amigos, se pusieron nerviosos al ver un coche de la Policía Local en la calle Buen Pastor, salieron corriendo y fueron detenidos.
Los otros dos fueron detectados por la Policía nacional junto a los salesianos de la carretera de Ledesma.
Se cambiaron de ropa
Los atracadores habían ocultado los pasamontañas y la ropa que llevaban en el atraco en un solar próximo al lugar del robo, donde también aparecieron la pistola y el dinero sustraído el kiosco.
Uno de los menores quedó en libertad al no ser imputable y fue entregado a sus padres, mientras que los otros tres quedaron detenidos por orden del fiscal de menores.
