El rector de la Universidad de Salamanca, Daniel Hernández Ruipérez, y el director adjunto de la Oficina del VIII Centenario, Julio Cordero, han presentado esta mañana la muestra “Destierro / Des-cielo. Unamuno, de París a la República. 1924-1930” en la Sala de Exposiciones “Cielo de Salamanca”, que se podrá visitar desde hoy hasta el 28 de febrero.
La exposición ilustra uno de los periodos más cruciales de la vida de Miguel de Unamuno, escritor, filósofo y exrector de la Universidad de Salamanca, a través de más de 300 piezas, que incluyen fotografías, documentos e incluso objetos personales.
Organizada por la Oficina del VIII Centenario de la Universidad de Salamanca en colaboración con la Casa Museo Unamuno y el Servicio de Actividades Culturales, esta muestra se distribuye a través de tres secciones. En primer lugar, se observa la dimensión del hombre despatriado que ha de vivir en otro país y ocuparse de su familia, tanto en la vertiente afectiva como económica. Continúa con su figura como creador y gestor de su producción editorial. Y finaliza con su actividad como agitador político y social.
El destierro
“Destierro / Des-cielo” revisita el periodo comprendido entre el momento en que Unamuno decide abandonar Fuerteventura con destino a París, en 1924, y el de su retorno triunfal, en 1930. Si bien había sido amnistiado del destierro en Fuerteventura decretado por la dictadura de Primo de Rivera, decide no regresar y exiliarse voluntariamente.
El título de la exposición se extrae de una de las cartas escritas por Unamuno en ese periodo, que Ediciones Universidad de Salamanca, encargada del catálogo de la muestra, publicó recientemente en una obra auspiciada por la Oficina del VIII Centenario de la Universidad de Salamanca, “Cartas del destierro”. En una de ellas, Unamuno hace referencia a este periodo en estas palabras: “Y más en este destierro, lejos de los míos, que a veces se me hace des-cielo. ¡Aquí, viendo cómo tantas de mis juveniles esperanzas de recuerdos se me están convirtiendo en seniles recuerdos de esperanzas y lo que llamo mis exfuturos!”.