El que fuera abogado de Luis Bárcenas, Javier Gómez de Liaño, ha señalado a María Dolores de Cospedal y su entorno como los principales responsables de la “persecución” que sufrió desde el PP con el objetivo de que el caso Gürtel “no llegara a buen puerto”.
La Cadena SER ha desvelado la declaración del que fuera abogado de Luis Bárcenas, Javier Gómez de Liaño, en la Audiencia Nacional. Esta testificación se produce en el marco de una investigación sobre cómo se trató de chantajear al abogado desde el PP con el fin de frenar las filtraciones de Bárcenas, así como para lograr que el caso Gürtel “no llegara a buen puerto”. Esos chantajes amenazaban a Gómez de Liaño con sacar a la luz supuestos cobros por servicios profesionales en Suiza, que acabaron resultando falsos.
En esta investigación se trata el papel de tres intermediarios, así como del excomisario José Manuel Villarejo en la “persecución” que sufrió Gómez de Liaño tras asumir la defensa de Bárcenas y su mujer, Rosalía Iglesias.
De esta manera, el abogado ha señalado a María Dolores de Cospedal, de quien, asegura, “me consta que tenía un gran interés en que lo relacionado con el asunto de Luis Bárcenas y con Gürtel no llegara a buen puerto”. También ha reconocido que no fue ella directamente, sino “vías indirectas”, que, según explica, “era un abogado del Estado” cercano a Cospedal y que pertenecía al “lobby judicial” del PP, aunque desconoce su identidad.
Gómez de Liaño, que declara como perjudicado en el caso, relata que esa “persecución” se trató de espionaje, controlando entradas y salidas en su despacho, fake news sobre él y un supuesto delito de blanqueo o “agentes del CNI” “abordando” a “una de las secretarias del despacho, haciéndole ofertas muy generosas si informaba a quienes la asaltaban y si sacaba documentación del despacho”.