La Asociación de Afectados por Fármacos (Adaf) ha presentado una demanda acusando de “inacción” al Ministerio de Sanidad y a la Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios (Aemps), por la prescripción de Nolotil, un medicamento que, en algunos pacientes, ha causado efectos adversos serios.
En la demanda de la Adaf, presentada el pasado 14 de noviembre ante la Audiencia Nacional, esta asociación acusa a Sanidad y a la Aemps de “inacción a la hora de proteger a la ciudadanía de los riesgos del metamizol”, uno de los analgésicos más recetados y que en España se comercializa bajo la marca Nolotil, así como de “lesionar los derechos fundamentales” de los ciudadanos.
Con esta demanda, la Adaf busca “que se prohíba la administración de Nolotil en España a la población británica y a los ciudadanos de los países donde este medicamento está prohibido”, que son cerca de 40, entre ellos Reino Unido, Francia o EEUU. Además, exigen que se revise la ficha técnica y el prospecto del fármaco, tal y como ha explicado a 20minutos la presidenta de Adaf, Carmen García del Campo.
Tal y como denuncia García del Campo, que señala a un estudio realizado en julio de 2021, la población británica presentaba un riesgo de padecer agranulocitosis entre 80 y 120 veces mayor que el resto. “No entiendo cómo para quitarte un dolor te puedes exponer a morir o sufrir amputaciones”, lamenta la presidenta de la asociación, en cuyos registros hay “al menos 350 casos” de pacientes “afectados por este medicamento sin haber sido advertidos sobre sus riesgos”.
Frente a ello, desde Sanidad han insistido que, ya en 2018 la Aemps revisó la situación del medicamento en España, después de que el Sistema Español de Farmacovigilancia notificase varios casos de agranulocitosis. Esta patología, que principalmente afectaba a pacientes de origen británico, se debe a una disminución de los granulocitos (un tipo de glóbulos blancos), que ayudan a combatir las infecciones, provocando una caída repentina del sistema inmune y pudiendo resultar mortal.
Tras esa revisión, la agencia estableció una serie de recomendaciones con el fin de minimizar riesgos, entre las que se incluía la de “no utilizar metamizol en pacientes en los que no sea posible realizar controles”. Entre ellos, señalaba a la “población flotante”, un grupo en el que se incluyen los turistas extranjeros.
Sobre este efecto adverso, contemplado en la ficha técnica del medicamento, Sanidad reconoce que, “se ha incrementado en los últimos años de forma paralela al aumento del consumo de este analgésico y, aunque se ha discutido desde hace años sobre una mayor susceptibilidad para la agranulocitosis en la población del norte de Europa y se han estudiado ciertos factores genéticos, con la información disponible no se podía descartar ni confirmar un mayor riesgo en poblaciones con características étnicas específicas”.
En la ficha técnica del Nolotil se indica que este fármaco -administrado bajo prescripción médica- “presenta riesgo de agranulocitosis, que es rato pero que puede poner en riesgo la vida del paciente”, aunque lo califica como “muy raro”. Por su parte, desde Adaf insisten en que, “el Nolotil ha demostrado tener efectos secundarios devastadores, como amputaciones, fallecimientos, reacciones alérgicas graves, choque anafiláctico, agranulocitosis, daño renal o hepático, sepsis, fallo multiorgánico…”.