Los expertos que evaluaron la gestión de la Covid han alertado de que es probable que se produzca a corto o medio plazo una nueva pandemia con virus respiratorios de gravedad. Ante este elevado riesgo, proponen fortalecer los sistemas sanitarios, aprobar una ley de pandemias o contar con reservas de material de protección.
Casi cuatro años después del inicio de la pandemia del coronavirus, el equipo de expertos que ha auditado la gestión de la crisis sanitaria ha concluido su Evaluación del Desempeño del Sistema Nacional de Salud Español frente a la Pandemia Covid-19. En este informe, adelantado por la Cadena SER, los auditores señalan las cosas que se hicieron bien y mal, así como las medidas que se deben adoptar ante el riesgo probable de una nueva pandemia con virus de alta gravedad en el corto y medio plazo.
Entre las 72 medidas que consideran necesarias, destacan algunas de ellas, como actuar cuanto antes, aplicar el principio de precaución y detectar los casos de forma precoz. También es fundamental reforzar el sistema sanitario, especialmente la atención primaria, para que no colapse, así como establecer un marco legal, a través de una ley de pandemias, que aporte seguridad jurídica.
Además, los expertos apuestan por contar con una reserva de material de protección (mascarillas, guantes…), un buen sistema de rastreo o protocolos de protección en las residencias de ancianos. Respecto a las vacunas, se muestran partidarios de que estas tengan un precio razonable para que puedan llegar a todos los países.
Errores y aciertos
Dentro de las cosas que se hicieron mal hace cuatro años, los autores de la auditoría lamentan que, en enero de 2020, no estábamos lo suficientemente preparados para hacer frente al coronavirus. Entre otras cuestiones, lo achaca a la falta de material, pruebas diagnósticas, un marco legal suficiente o protocolos en las residencias de mayores.
Además, alude a otros problemas preexistentes como las deficiencias en los sistemas de vigilancia epidemiológica, los fallos de coordinación en los servicios de emergencias y urgencias, la falta de eficacia del Consejo Interterritorial del Sistema Nacional de Salud a la hora de tomar decisiones homogéneas en todas las autonomías, o la falta de un sistema de información adecuado.
Finalmente, entre “las cosas que se hicieron bien” señala a la respuesta, pese a la falta de medios, de los profesionales sanitarios y de salud pública, así como de los trabajadores de las residencias de ancianos. Además, considera excelente la campaña de vacunación y valora positivamente la creación de algunas medidas sociales como los ERTEs o la información casi inmediata y de alta calidad por parte de los medios de comunicación.