El año 2023 termina con Estados Unidos liderando una misión militar en el mar Rojo para proteger el tráfico de mercancías. La operación internacional Guardián de la Prosperidad tiene una causa concreta: los ataques hutíes contra buques mercantes. No obstante, la causa fundamental se encuentra en los tentáculos persas que impulsaron a Hamás a atacar Israel; una basculación entre la atracción de Cisjordania y la pérdida de Gaza que, ante la implacable respuesta israelí, provoca a su vez otra reacción subsidiaria a través de estos insurgentes yemeníes.
Irán pretende rodear a Israel con sus satélites: Hezbolá por el norte, Hamás por el oeste, las milicias iraquíes proiraníes por el este y los hutíes por el sur. Mientras tanto, Israel no para de mejorar gradualmente su relación con los diferentes Estados árabes. Teherán y Tel Aviv empiezan a desplegar un terreno favorable para protagonizar una época de rivalidad entre un complejo entorno que sigue diluyendo el concepto cerrado de mundo árabe; allí los aliados de uno son demasiado débiles y los del otro muy tímidos. Lo cierto es que cada Estado o milicia árabe tiene sus propios objetivos.
Ahora bien, entre la competencia de las grandes potencias y las potencias regionales, por fin muestra la cara un esperado gigante: la India supera a China y se vuelve el país más poblado del mundo, justo cuando se convierte en el primer Estado en alunizar una nave no tripulada en el polo sur de la Luna. Todo durante el año en que la cumbre del G20 se desarrolló en Nueva Delhi.
Lo más importante de esta cumbre ha sido la presentación del Corredor Económico India-Oriente Medio-Europa, proyecto que es auspiciado por Estados Unidos e integra a Arabia Saudita y Emiratos Árabes Unidos con Israel, lo cual parece una contestación, contestada por Irán, a la Iniciativa de la Franja y la Ruta de China que atraviesa Cachemira, punto de tensión con Pakistán.
Asimismo, la India se muestra como alternativa a China para las multinacionales tecnológicas y no deja de invertir en tecnología. De este modo, se digitaliza y busca exportar su Infraestructura Pública Digital; la iniciativa One Future Alliance sería una vía para ofrecer asistencia técnica y apoyo financiero a los países en vías de desarrollo que quieran aplicarla. Ya no cabe duda de que Nueva Delhi empieza a recoger los frutos expansivos de su vigor tecnológico, pues un 60% del total de sus exportaciones de servicios corresponde a las TIC y además se vuelve protagonista en IA.
La India, sin alinearse claramente, se propulsa pragmáticamente mediante la tecnología y en este ámbito también se encuentra inexorablemente con Israel: más allá del peso en defensa y ciberseguridad de los últimos años, dado que la India es el mayor comprador de equipos militares israelíes, en 2023 ambos gobiernos han firmado un memorando de entendimiento sobre cooperación en investigación y desarrollo industrial.
Luego de 30 años de relaciones diplomáticas fructíferas, la reacción de Modi a la guerra de Gaza, denunciando el ataque terrorista de Hamás, evidencia su sintonía con el país hebreo; Netanyahu ya había manifestado que el límite en las relaciones entre ambos Estados se encontraba en el cielo, al tiempo que Subrahmanyan Jaishankar, ministro de Asuntos Exteriores indio, definió a Israel como el socio más fiable.
La India e Israel mantienen una enérgica relación basada en la cooperación tecnológica para superar el desarrollo de sus rivales estratégicos, por lo cual no es de extrañar que el año termine con una explosión en las proximidades de la embajada de Israel en Nueva Delhi.
Augusto Manzanal Ciancaglini
Politólogo