Un hombre ha resultado herido tras recibir un disparo en la cara por parte de un individuo que ya ha sido detenido por la Policía Nacional de Salamanca.
La víctima ha tenido que ser intervenida quirúrgicamente para extraerle el perdigón que le había quedado incrustado en su rostro tras recibir un impacto de una pistola de gas comprimido.
Y eso que el agresor solo acertó uno de los tiros que le descerrajó antes de huir del lugar de los hechos.
Los hechos ocurrieron este miércoles por la tarde. Una vez alertada la Policía Nacional de lo ocurrido los agentes acudieron al domicilio de la víctima. Encontraron a un hombre que sangraba abundantemente por la zona superior labial. Les manifestó que momentos antes un joven le había apuntado a la cabeza con una pistola y le disparó varias veces, alcanzándole uno de los impactos en el rostro.
Cuando los policías aún estaban en el domicilio, la víctima recibió una llamada de su agresor amenazándole con vaciarle el cargador si se le ocurría ir a su casa.
Una vez que el herido fue asistido y trasladado al hospital Universitario de Salamanca, los agentes acudieron al domicilio del atacante.
Al llegar escucharon detonaciones y observaron el cañón de un arma asomando por encima de la barandilla del balcón, por lo que aseguraron la zona alejando a los transeúntes del potencial peligro.
El detenido fue encontrado escondido debajo de la cama de una de las habitaciones del domicilio y el arma, bajo un cojín del sofá del salón.
El detenido carecía de la licencia administrativa correspondiente a este tipo de armas. Una vez finalizadas todos los trámites se dio cuenta de los hechos con la remisión de todo lo actuado al Juzgado de Guardia de esta ciudad, pasando el detenido a disposición de su titular.