El Ibex 35 sufrió este viernes su peor sesión desde septiembre de 2013 tras caer un 3,91 por ciento, lastrado por la ampliación de capital del Banco Santander y el precio del petróleo que sigue cayendo y ya está en 50 dólares el barril.
Los mercados europeos también han sufrido los efectos del abaratamiento del crudo, pero en España la caída se ha amplificado con el efecto Santander.
La entidad anunció el jueves una macroampliación de capital de 7.500 millones de euros colocados entre inversores institucionales (no entre particulares) con un descuento del 10% sobre el precio que tenían las acciones al mediodía.
Se suspendió su cotización para no alterar el mercado, pero en cuanto la acción regresó a la cotización este viernes el valor ha sufrido una sacudida espectacular, con una caída final del 14 por ciento (llegó a superar el16% a lo largo de la sesión).
Aunque el Santander asegura que esta operación le refuerza, en realidad se ha interpretado como lo contrario. Además de captar ese dineral vendiendo acciones con un gran descuento, anunció que recortaba el dividendo a los accionistas en un 60%, pasando de los 60 céntimos al año a poco más de 20.
Tras el batacazo del Santander los mayores descensos correspondieron a Dia (5,8%), Repsol (3,7%), BBVA (3,1%) y Telefónica (2,57%).
