1.780 firmas en contra de la subida del IBI en Villamayor

Una representación de vecinos de Villamayor ha entregado, en el Ayuntamiento de la localidad, 1.780 firmas en contra de la subida del Impuesto de Bienes Inmuebles (IBI), en un acto en el que han estado acompañados por representantes de tres partidos con representación municipal, PSOE, VOX y Ciudadanos.

Las firmas han sido recogidas en dos semanas por las que se exige al equipo de Gobierno, del Partido Popular que reconsidere esta decisión y busque alternativas para financiar los servicios públicos que ofrece a la localidad.

A través de este escrito, los vecinos denuncian una subida desproporcionada, aprobada por la mayoría absoluta del PP, y que aumentará la carga financiera sobre las familias de Villamayor.

El equipo de Gobierno del Ayuntamiento de Villamayor, haciendo uso de su mayoría absoluta, ha aprobado la subida del IBI (impuesto de bienes inmuebles) desde un tipo impositivo del 0,62 sobre el valor catastral a un 0,78, lo cual supone un 26% de subida; que, unido a la actualización catastral realizada para este ejercicio 2024 en algunas zonas del municipio, va a suponer un incremento del 40% (39,76%) lo que se espera recaudar sobre lo recaudado en el ejercicio anterior.

En un momento en el que la economía de las familias ya está sometida a una gran presión, el anuncio de la subida del Impuesto sobre Bienes Inmuebles (IBI) es una bofetada injusta para los ciudadanos del municipio. Por ello, los vecinos de Villamayor se han visto en la obligación de levantar la voz en contra de esta medida desproporcionada, desconsiderada y que no se corresponde con el IPC ni ningún otro índice económico que pueda justificarla.

El IBI es un impuesto que afecta de manera directa a todos los propietarios de bienes inmuebles, independientemente de sus ingresos o capacidad económica. La subida propuesta solo aumentará la carga financiera sobre las familias ya agobiadas por la inflación, los precios crecientes de la vivienda y los gastos diarios cada vez más elevados. Además, los vecinos se muestran profundamente preocupados por el impacto que esta subida tendrá en los ciudadanos más vulnerables del municipio, por los que luchan cada día para llegar a fin de mes. «¿Cómo pueden justificar las autoridades locales esta medida cuando muchos de los vecinos apenas pueden pagar sus facturas básicas?», se preguntan.

Además, es importante señalar que esta subida del IBI no se acompaña de una mejora significativa en los servicios municipales. Los ciudadanos están siendo forzados a pagar más sin recibir un retorno equivalente en términos de infraestructura, seguridad o calidad de vida.

El movimiento vecinal, que ha surgido de manera espontánea, quiere agradecer sinceramente a todos los vecinos y vecinas que han participado en esta iniciativa, así como a aquellos que han ofrecido su apoyo y solidaridad en este proceso, porque “juntos somos más fuertes y juntos lograremos un cambio positivo en nuestro municipio”.