Los fiscales del Tribunal Supremo han atribuido a Carles Puigdemont el “liderazgo absoluto” de Tsunami Democràtic, “un grupo organizado de carácter terrorista”. Por ello, insisten en que, “no cabe duda alguna de que los hechos encajan perfectamente” con el delito de terrorismo. Así se desprende del escrito enviado por el fiscal de Sala jefe del Tribunal Supremo, Fidel Cadena, a la número dos de la Fiscalía, María Ángeles Sánchez Conde.
Este documento, que determinará el criterio del Ministerio Público a la hora de solicitar que se investigue o no a Puigdemont por terrorismo, apunta a “la pluralidad de indicios” que “acredita dominio funcional del hecho, liderazgo absoluto, autoría intelectual y asunción de las riendas” de Tsunami Democràtic por parte de Carles Puigdemont.
Tal y como exponen los fiscales, el expresident catalán, “desde el principio” “estuvo informado de la constitución de Tsunami” y “aparece directamente implicado en el lanzamiento de la campaña de Tsunami”. Además, insisten en que, pese a que pudo retirar “apoyo carismático” al grupo, “lejos de eso animó a seguir en las acciones violentas que se desarrollaron con su conocimiento y consentimiento”.
Sobre Tsunami Democràtic, aseguran que se trata de un grupo “animado por fines de subversión del orden constitucional y desestabilización grave de las instituciones democráticas, impidiendo a los poderes públicos cumplir sus resoluciones”, considerado por los propios independentistas como “la herramienta para alcanzar la independencia”.
Siguiendo con ello, el documento atribuye a los miembros de Tsunami “delitos graves contra la libertad, integridad física, de atentados, falsedades documentales, el patrimonio y otros”. “El elemento subjetivo común que los une, transforma y convierte en delitos de terrorismo, que asumen y absorben todos ellos, es la subversión del orden constitucional, la alteración de la paz pública, la provocación de terror en una parte de la población y la desestabilización grave de las instituciones políticas del Estado”, añaden.
Por todo ello, los fiscales aseguran que, “no cabe duda alguna” de que “los hechos encajan perfectamente” en el delito de terrorismo. Así pues, en base a “la pluralidad de indicios probatorios sólidos y fundados”, solicitan a la número dos de la Fiscalía que asuma la investigación y cite a Puigdemont.
Ante este escrito, el expresident fugado de la justicia ha calificado las conclusiones de los fiscales como “dinamita para el Estado de derecho”. Además, ha acusado a “jueces, fiscales, policías y determinados políticos y medios” de llevar a cabo “conductas que claramente son delictivas”. Finalmente, ha insistido en que la acusación de los fiscales solo se puede entender porque “dé credibilidad a una información delirante y manipulada de los servicios policiales” o que, “sabiendo que es una información delirante y manipulada, la use para un propósito puramente político”.
