La Central Sindical Independiente y de Funcionarios (CSIF) se ha consolidado como la principal fuerza sindical de la Junta de Castilla y León tras los resultados obtenidos en las elecciones celebradas este 7 de marzo. El sindicato independiente ha obtenido un total de 264 delegados.
Tras las elecciones sindicales celebradas este jueves 7 de marzo en la administración general de la Junta y en las gerencias de Salud, CSIF se consolida como primera fuerza dentro de la Función Pública de la Junta de Castilla y León con un total de 264 delegados, sumando 12 más tras los 167 conseguidos ayer. Se distribuyen en 132 de Administración de la Junta, 72 de Sanidad y 60 de Educación.
No han podido votar en Segovia y Soria, porque las impugnaciones presentadas por algún sindicato han paralizado la celebración de las elecciones de este jueves, y tampoco ha habido elecciones en alguna unidad electoral porque no ha finalizado el mandato. Educación celebró los comicios en 2022.
La Central Sindical Independiente y de Funcionarios (CSIF) ha ganado las elecciones sindicales de este 7 de marzo (Administración de la Junta-AGCyL y Sanidad, al conseguir 167 delegados) Por su parte, UGT ha obtenido 148, CCOO 137, Cesm-Uscal-Tiscyl-Seacyl 133, Satse-Fses 76 y CGT 65.
En el caso de la administración general de la Junta, CSIF ha conseguido 47 representantes de funcionarios, la mayor representación, y 65 de laborales. En sanidad, CSIF se reafirma -de manera más destacada- como el principal sindicato sanitario de carácter general que representa a todas las categorías profesionales de Sacyl, con 53 delegados (43 en junta de personal y 10 en el comité de empresa).
Han podido votar 21.000 trabajadores de los diferentes servicios de la Administración General de la Junta de Castilla y León y 31.250 de Sacyl. Otros 16.000 no lo han podido hacer por paralizarse las elecciones en alguna provincia o porque el mandato no ha finalizado.
El presidente autonómico de CSIF Castilla y León, Benjamín Castro, denuncia y lamenta el empeño de otros sindicatos en intentar paralizar “hasta el último minuto las elecciones en toda la comunidad, a pesar de que el mandato sindical había terminado y lo que toca -por tanto- es que todos los trabajadores, ejerciendo un derecho democrático, puedan elegir y renovar a los delegados que defiendan sus derechos laborales y sus intereses”. Castro confía en que los trabajadores públicos de la Junta de Segovia y Soria puedan, también, “muy pronto”, elegir a sus representantes, como se ha hecho en el resto de la comunidad.