Quizás el tema que hoy traigo cree cierto conflicto, controversia o simplemente alguien se pueda dar por aludido. No quisiera convertirme en cierto colaborador de cierto programa, que lidera las audiencias en la noche y que es famoso por sus polémicas, pero ya no lo puedo resistir y hoy yo también voy a ser polémica.
No aguanto la gente que copia y mal el trabajo de los demás, que les pone un nombre parecido y pretende llevar a cabo tu trabajo en su territorio y por si fuera poco espía tus redes, web y pide información con buenas artes y malos hechos.
Por mucho que pretenda llegar a tu nivel, nunca será más que un mediocre que intenta mantener un rol que le queda bastante grande a consta del trabajo de los demás.
Trabaje y haga sus propios proyectos, emociónese buscándole un nombre, cúrreselo que para eso le pagan y después disfrútelo porque será suyo, pero si copia el trabajo de los demás, pasará a lo que es hoy, un clon barato y sin sentido que nunca llegara al nivel de quien lo ha parido.
No solo eso, dejará su nivel de bajeza moral, donde siempre ha debido de estar, a la altura de los zapatos de quienes, sí trabajamos, rompiéndonos la cabeza para mejorar el mundo de roña que muchos de ustedes, con estas cosas y otras muchas, están dejando.
Ya ven que no todo es happy en este mundo, ya ven que hay gente que está en él porque tiene que haber de todo, pero saben lo mejor que todo esto te hace ver que estás en el camino correcto y que tu valía personal y profesional está por encima de mediocres que nunca serán más que un borrón, por no decir otra cosa, en un camino que tiene este tipo de cosas y estos personajillos que no tienen ni ideas propias, aunque les paguen por ello y pretendan ser lo que jamás serán, aunque crean que tienen algo, cuando se queden a solas consigo mismo, no creo que si sientan felices, siendo un títere de paja, en manos de otros a los que le deben lo que se llevan a la boca.
Polémica no sé, pero el mensaje sí que queda y es que vivir con el esfuerzo de los demás, es algo que, en esta sociedad, todavía se estila. No tener actitudes, inquietudes y tener como objetivo el corta y pega, demuestra la nula educación y el no tener ningún respeto hacia los demás y así nos pasan las cosas que nos pasan, aunque la suerte los acompañe, no siempre será así.
Ahí lo dejo.
Puestos a hablar de cosas más bonitas, mi felicitación a La Crónica de Salamanca, el periódico desde el que hoy soy polémica y que me abrió sus puertas hace ya unos años para contarles lo que no se cuenta del acoso escolar, para pedir una sociedad justa y unos derechos humanos que no distinga entre quien puede y quien no.
Felicidades por esos diez años, de buen trabajo y por demostrar que la noticia debe ser fiel a la realidad, sin filtros, ni parches y mi agradecimiento por permitirme ser parte de la vida y la historia que marca La Crónica de Salamanca.
Todo un placer.